ROSARIO/Vecinos de barrio Martin se quejan por la poda salvaje de los árboles del colegio Nacional Nº1

Los especímenes añosos fueron podados el sábado a la mañana por una cuadrilla de una empresa privada que fue contratada por la dirección del establecimiento educativo. El barrio se sorprendió ante el cambio del fisonomía de la cuadra sin la sombra fresca de los viejos jacarandaes.

Los vecinos de barrio Martín se sorprendieron el fin de semana cuando asistieron a la poda de los añosos jacarandaes ubicados en los jardines exteriores del del colegio Nacional Nº 1, ubicado en 9 de julio al 100. Fue el sábado a la mañana, cuando una cuadrilla de operarios se abocó al corte de las ramas de los añosos especímenes. Según pudo saberse, la desición de las autoridades del establecimiento educativo se tomó ante las numoreosas quejas que recibieron debido a que en la cuadra de Necochea, donde extendían sus ramas los árboles podados, estaba permanentemente sucia debido a las deposiciones de los númesos pájaros que hacía nidos en el lugar. "Era un asco, no se podía caminar por la vereda del colegio, estaba siempre sucia", dijo a LaCapital.com.ar, Alejandra, unas de las clientas de la verduería ubicada en la esquina de Necochea y 9 de Julio que no podía salir de su asombro ante la decisión de podrar los jacarandaes. "Es una salvajada", se quejó sin poder ocultar su enojo. Vecinos del lugar aseguran que la determinación de cortar los árboles se precipitó después de que, durante la fuerte tormenta de viento de la semana pasada, una de las palmeras ubicadas en los jardines del colegio cayó pesadamente sobre un automóvil estacionado por Necochea, causándole graves daños, que fueron reclamados a la escuela. "A nosotros nos contrató la directora de la escuela para que cortáramos los árboles", contó uno de los operarios que pidió no ser identificado. Una cuadrilla, munida de sierras elécticas, trabajaron durante varias horas para cortar las ramas de los árboles que terminaron apliadas en volquetes emplazados frente al colegio. Lo cierto es que la frondosa arboleada que le daba personalidad y sombra a los jardines del Nacional Nº 1, tan apreciada por los habitantes del barrio, desde el sábado pasado no existe más.