En los comercios del rubro registraron un alza en la actividad ya que la buena tecnología requiere buenas copias.
|
Pese a que la actividad en los videoclubes venía en franca caída desde hace tiempo, los titulares de este tipo de comercios aseguraron que en el último año evidenciaron una ligera alza en su actividad con respecto al año pasado, al hacerse del nicho de consumo que supone el formato de películas Blu-Ray, el sistema con mayor definición que existe en el mercado y que se demanda gracias a la nueva tecnología en materia de televisores. Según argumentaron desde la Cámara de Videojuegos de Argentina, el fenómeno también se relaciona con que sólo quedaron 50 videoclubes de los 250 que había en 2005 y las personas que adquieren nueva tecnología necesitan una altísima calidad de imagen y sonido, que contrasta con la que ofrecen películas truchas. A todo esto, esta semana llega a Argentina un nuevo servicio de suscripción que brinda acceso ilimitado a series y films. De esta manera, se suma a la cartilla de consumo cultural –venta de copias, descarga de internet, y visualización on line– que atenta contra el hábito del alquiler. En diálogo con El Ciudadano, el representante dela Cámara Argentinade Videoclubes y dueño de Alternativa Videoclub, Alejandro Botbol, aseguró que respecto a la misma “temporada alta” –por el periodo de más frío– de 2010 aumentó la facturación de los locales de alquiler de películas en la ciudad. Sin embargo, las razones del incremento no son las más felices: “Quizás a costa de absorber los clientes de los videoclubes que cerraron sus puertas desde 2010, los adaptaron como quioscos o se pasaron a la piratería”, señaló Botbol. De acuerdo al representante del sector del video, otro de los motivos del alza fue la multiplicación de fines de semana largos, cuya traducción fue de un aumento en la facturación del 10 por ciento. “La gente se acercó al tener más tiempo libre. También empezamos a notar un regreso de viejos clientes que se habían pasado a la piratería pero se cansaron de la mala calidad de las películas piratas. Hoy, con la proliferación de la televisión de alta definición, el Blu-Ray (formato de altísima fidelidad y resolución de imagen y sonido), los clientes buscan calidad”, reflexionó Botbol. El advenimiento de los televisores de plasma, LCD y ahora LED, acompañado por la expansión de los “home theatres” –dispositivos de sonido ubicados en una habitación que simulan la experiencia de cine– y la proliferación de canales de televisión HD (High Definition o Alta Definición) produjo un nuevo nicho: el del formato Blu-Ray. “La calidad de imagen es una diferencia a favor de los videoclubes. Muchos han comprado «súpertelevisores» y desean tener un contenido acorde para alimentarlos”, aclaró Botbol, quien confiesa que entre un 12 y 15 por ciento de su facturación es por Blu-Ray. El ligero “repunte” se enmarca en un importante retroceso que venía experimentando la industria del video en Rosario debido a que desde 2005 cerraron alrededor de 180 videoclubes. La tendencia dejó sólo unos 50 locales de alquiler de películas en los formatos DVD, Blu-Ray y, en muy pocos casos, el antiguo VHS. Según indicaron desdela Cámara, existen otros 100 locales no habilitados que venden y alquilan películas: son truchas. En diciembre de 2010, el presidente del Concejo Municipal, Miguel Zamarini, se reunió con los representantes dela Cámarade Videoclubes de la ciudad y de algunos cines rosarinos para coordinar acciones tendientes a aumentar la competitividad de los comercios asociados y combatir la piratería. Por estos días, la comisión de Presupuesto del Concejo Municipal evalúa el proyecto de Zamarini que modifica la ordenanza General Tributaria Nº4.064 e incluye en las alícuotas diferenciales del cuatro y dos décimas por mil a los locales de alquiler o venta de juegos o películas. Desde el texto de la iniciativa se argumenta el cambio: “Debe equipararse la carga tributaria local del video hogareño con otras expresiones culturales tales como los libros, ya que hoy el acceso a la cultura se nos permite por numerosos recursos, resultando las películas uno ciertamente de importancia”. Como complemento, el proyecto solicita “a las reparticiones municipales pertinentes verificar que algunos locales comerciales habilitados respeten los alcances de sus respectivas habilitaciones, ya que según denuncias, se dedicarían a la venta de películas y juegos ilegales”. Entre los considerandos del proyecto, Zamarini destaca que “los operadores de internet son quienes tendrían la llave para terminar con la piratería” y enfatiza: “No obstante mientras la comunidad tecnológica discute las posibilidades al respecto, en los ámbitos más cercanos y cotidianos pueden verse las consecuencias concretas de un problema que no por ser de carácter global, debemos dejar de pensar alternativas para al menos disminuir sus efectos”. Según Botbol, desdela Cámarade Videoclubes no se tomó ninguna medida para aumentar la competitividad de los comercios. “Se liberó para que cada uno adopte las estrategias que considere mejor. En mi caso, desde el mes pasado empezamos a implementar un sistema similar al Netfix, que mediante una suscripción mensual de 60 pesos permite un alquiler diario sin la obligación de devolverlo al día siguiente. Así, está la libertad de ver todas las películas que quieran. Y los clientes se han enganchado con la propuesta”, concluyó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario