En esta proyección coinciden el Servicio Meteorológico Nacional y el Instituto Nacional del Agua. El régimen de lluvias sería normal o inferior al promedio.
En la ciudad de Santa Fe, el invierno comenzó muy húmedo y no tan frío, pero ésa no sería la tendencia climática para el resto del trimestre. Los pronósticos estacionales del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) y del Instituto Nacional del Agua (INA) anticipan que durante los meses invernales las temperaturas podrían ser “levemente” inferiores a la media histórica.
Este escenario de lluvias débiles, que comenzó el lunes, terminaría el jueves a la tarde. “A partir de ese momento esperamos que las condiciones climáticas mejoren y es probable que baje un poco la temperatura”, adelantó a El Litoral Ignacio Cristina, del Centro de Informaciones Meteorológicas de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (Fich). Para el fin de semana, hasta el momento, no se pronostican precipitaciones en el área metropolitana de Santa Fe.
Durante el trimestre más frío, el régimen de lluvias también podría ser inferior al promedio. “En el Litoral argentino se prevén precipitaciones ‘inferiores a lo normal o normales, con alta variabilidad espacial’, precisan los técnicos del INA, en el informe que analiza los posibles escenarios hidrológicos en la Cuenca del Plata. La misma situación se pronostica para Uruguay, Paraguay y los Estados del sur brasileño.
El fenómeno de La Niña, que generó un escenario de sequía durante la primavera y el primer tramo del verano, ahora está en fase neutral. La tendencia que se anticipa para los próximos tres meses en realidad surge del consenso entre los especialistas del Servicio Meteorológico Nacional, del Centro de Previsiones y Estudios Climáticos (Cptec) de Brasil y de la opinión de los referentes de centros de investigación y universidades especializadas.
La Cuenca del Paraná
El impacto de las lluvias a lo largo del río Paraná también es un indicador importante para la ciudad, por el riesgo de inundaciones. En este punto, el informe del INA señala que los embalses en la alta cuenca del río se estabilizaron y que la perspectiva climática pronostica lluvias normales durante todo el invierno (el período de precipitaciones más intensas ya finalizó en esa región).
“La onda de crecida del verano terminó su propagación por el tramo medio del río en territorio argentino. Los niveles en el tramo correntino-chaqueño tuvieron un marcado descenso. Se espera para el próximo trimestre una evolución hacia los valores menores a los normales”, concluye el informe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario