Se trata de Omar Segado, propietario del bazar Lavalle, ubicado en General Paz y Ángel Cassanello. La víctima recibió un tiro luego de forcejear con el ladrón, que está detenido, y fallecio en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Cullen.
Anoche, a las 23.30, falleció en la unidad de terapia intensiva del hospital Cullen de la ciudad de Santa Fe, el propietario del bazar Lavalle, Omar Segado, de 71 años, ubicado sobre la avenida General Paz y calle Ángel Casanello en el barrio Villa Setúbal.
Segado fue herido con un disparo de arma de fuego de una lluvia de balazos que disparó un delincuente que ingresó a asaltar el negocio a las 9.30. Uno de ellos lo impactó en la ingle con daño severo en la arteria femoral, según la constatación de los médicos de la emergentología del hospital Cullen de Santa Fe, y que se convirtió en la causa determinante que le produjo la muerte al borde de la medianoche.
Toda una vida de trabajo
Omar Segado tenía 71 años y llevaba no menos de cuatro décadas al frente de ese negocio. Ayer por la mañana junto a su esposa estaban atendiendo a su clientela cuando ingresó un muchacho para preguntar por el precio de algunos artículos, hasta que en un momento sacó un arma de fuego, los apuntó, los amenazó y se hizo de algo más de 100 pesos en monedas que sacó de la caja registradora.
Reaccionaron indignados
Pero los esposos comerciantes, indignados con la situación que tuvieron que soportar a manos del solitario delincuente dentro de su local comercial, se abalanzaron sobre el delincuente y trataron de impedir que se saliera con la suya. Las consecuencias fueron las peores cuando comenzaron los tiros.
El ladrón sintió la resistencia y el castigo de la pareja, que lejos de amilanarse lo enfrentaron a golpes con lo que tuvieron a mano, y el delincuente respondió desatando una tremenda balacera en el interior del local, adonde hubo al menos cinco disparos de arma de fuego. Una de la ojivas impactó en la ingle del propietario del negocio, que quedó tirado en el piso del local.
El solitario ladrón que disparó a mansalva logró dejar malherido con un disparo que lo impactó en la ingle a Omar Segado, y su mujer inmediatamente salió a la vereda a pedir el auxilio de los vecinos y clientes de toda la barriada.
El ladrón previamente había montado en su motocicleta bordó de baja cilindrada y se fugó por calle Ángel Cassanello hacia el oeste primero, y otros lugareños vieron cuando cinco cuadras después al llegar a Sarmiento giró a toda velocidad hacia el cardinal sur.
Vecinos solidarios
Los vecinos del barrio Villa Setúbal, fueron los primeros que llegaron al local y auxiliaron a la víctima, mientras algunos, teléfono celular en mano, llamaban a la central de comunicaciones policiales 911 y denunciaban el suceso.
Minutos después vigilantes y patrulleros con balizas y sirenas encendidas del Comando Radioeléctrico, de la comisaría 5ª, de la comisaría 8ª y de la 5ª Inspectoría Zonal, poblaban la zona y reportaban el suceso, su naturaleza y sus consecuencias a la jefatura de la Unidad Regional UR I La Capital de la policía santafesina, que ordenó un operativo de búsqueda, saturación y chequeo de motovehículos.
Un dato revelador en este caso
Varios de los vecinos vieron cómo era la motocicleta del ladrón, la fisonomía de su rostro, sus características físicas y la indumentaria que vestía cuando lo vieron escapar luego de herir a Segado en el interior del local comercial bazar Lavalle. En el desenlace de esta historia, la casualidad les tenía reservado un papel principalísimo.
También terminó en el Cullen
En su intento de escapar, el delincuente hizo una mala maniobra para evitar un chequeo policial en la esquina de la avenida Blas Parera y Gorostiaga, cayó de su moto y quedó politraumatizado.
Los paramédicos trasladaron en una ambulancia al motociclista desde el country del Jockey Club al nosocomio. Mientras era atendido en la guardia, los vecinos de Segado que seguían junto a él, le dijeron al policía de guardia y a los médicos que ése era el ladrón que había asaltado y disparado sobre la humanidad de la víctima. Tal es así, ya que ellos lo vieron cuando escapó en la motocicleta.
Los policías que estaban en la guardia de prevención del hospital José María Cullen fueron anoticiados sobre la novedad, lo dejaron detenido preventivamente y comunicaron el suceso a la jefatura y al juez penal en turno.
Pero ahora no solo estará privado de su libertad por la agresión al comerciante Segado, sino que está imputado por la presunta responsabilidad criminal en el homcidio de la víctima.
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