viernes, 10 de agosto de 2012

SANTA FE: “De Santa Rita II no nos fuimos, nos sacaron bandas armadas”


Las 13 familias que dejaron las viviendas ocupadas en el norte de la ciudad denunciaron que hay 30 personas armadas que amenazan a los vecinos para que se vayan. El martes hirieron a una mujer.


    “De Santa Rita II no nos fuimos, nos sacaron bandas armadas”
    Las más de 160 familias que ocupan el complejo de viviendas de Santa Rita II desde hace casi cuatro meses comenzaron a sufrir amenazas para abandonar el lugar. Según los habitantes de ese barrio en un principio eran cuatro o cinco personas. Pero el miércoles pasado, aseguran, hubo más de 30 personas que comenzaron a disparar con armas de fuego contra las casas y a exigir que abandonen las unidades habitacionales.


    En total fueron 13 familias las que dejaron las casas que estaban ocupando y sus versiones prácticamente están en el polo opuesto de lo manifestado por algunos funcionarios provinciales, que aseguraron que las familias se fueron por su cuenta sin que haya disturbios.


    En diálogo con Diario UNO, una de las vecinas que ahora está acampando en la puerta del Ministerio de Desarrollo Social afirmó: “Nosotros no nos fuimos, nos sacaron bandas armadas y no tenemos a dónde ir”.


    Por su parte, Leonel Spagnolo, referente de la Juventud de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), organización que propició la toma de las viviendas de Santa Rita II, señaló: “En estos últimos días estuvimos denunciando públicamente, ante la policía y los funcionarios públicos que está funcionando una banda que ellos conocen con nombre y apellido”.


    “Ayer (por el miércoles) llegaron a ser más de 30 armados que empezaron a amenazar. El martes le pegaron un tiro en la pierna a una compañera que intentó defender su vivienda. Ayer empezaron a amenazar a otras familias y consiguieron desalojar a 12. Hoy siguen actuando y nosotros denunciamos que hay una zona liberada con la particularidad de que tiene presencia policial. La policía está mientras ellos actúan”, aseveró.


    “Cuando hirieron a nuestra compañera –continuó–, nosotros llamamos a Seguridad Comunitaria, hablamos con Ramiro Arola (director de Planificación y Evaluación del Ministerio de Seguridad) y nos dijo, que si nosotros entramos a Santa Rita II que nos la banquemos. Esa fue la respuesta textual de ellos”.


    “Ayer el barrio estaba en medio del tiroteo, les volvimos a plantear que el barrio seguía siendo una zona liberada, nos respondieron lo mismo y nos dijeron que iban a ver cómo hacían. En el fondo nos dijeron: «Banquensela porque ustedes generaron eso»”, expresó.


    Luego Spagnolo insistió: “Nosotros venimos denunciando a estas bandas que organizan la droga y la delincuencia en los barrios desde hace mucho tiempo. Son bandas que generan inseguridad en cualquier parte, no sólo a los miembros de la CCC, ni a los habitantes de Santa Rita II. Sino que amenazan a los vecinos de los barrios cercanos y vienen desde distintos barrios. Son todos nombres conocidos para la policía y para el gobierno”.


    “Hoy la situación sigue igual. Tal vez un poco más calma, pero siguen las amenazas y hay compañeros que están cargando las cosas para venir a Desarrollo Social porque no tienen dónde ir, tal como lo demostró el propio relevamiento que hizo el gobierno en Santa Rita II. La gente que está y la que estaba ahí es porque estaba en situación de calle. No tenía dónde ir. No puede ser que hace cuatro meses esté este problema y no haya una solución”, se quejó.


    Por último dijo: “Han sucedido hechos graves. Este jueves balearon la casa a cinco familias que estaban encerradas porque los corrieron y los amenazaron. Si la policía no actúa, si el gobierno no toma la decisión de frenar a estas bandas y solucionar el tema de la vivienda puede haber hasta un muerto porque, evidentemente, no tienen códigos”.


    Más allá de la situación irregular en la que se encuentran las familias de Santa Rita II, el Estado no puede desentenderse de la situación de violencia que se está viviendo en el lugar. Hoy parece que lo único que le importa al gobierno provincial y a la Municipalidad es que se desocupen las casas, no importa cómo. Pero el conflicto de fondo sigue y seguirá latente. Las familias que se tuvieron que ir de Santa Rita II no tienen dónde ir. Y eso no se resuelve mirando hacia un costado.

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