sábado, 11 de agosto de 2012

NAC. Flor Kirchner tiene un capital 126 veces más grande que su tía Alicia

Es por la herencia de su padre. Florencia se quedó con más de 15 millones de pesos. La ministra tiene apenas 124 mil pesos.

 

foto perfil.com

En familia. Alicia y Florencia, en Santa Cruz. Flor recibió el 25% de los bienes de su padre.

Con 21 años, Florencia Kirchner, la más pequeña de la familia presidencial, es más rica que todos los ministros del Gobierno. Heredó de su padre $ 15.818.958. Lo mismo le tocó a Máximo. La cuenta final da $ 31.637.916, porque se repartieron en partes iguales el 50% de lo que tenía el ex presidente.

El ministro que más declaró en su última presentación fue Héctor Timerman, de Relaciones Exteriores. Su fortuna asciende a $ 10.544.301. En la lista le sigue el de Salud, Juan Manzur, con $ 9.905.654; Francisco Larcher, de la Secretaría de Inteligencia, con $ 4.036.077; el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, con $ 4.009.052; y el ministro de Defensa, Arturo Puricelli, con $ 3.838.472.

Lo que más llama la atención, al hacer la comparación con el patrimonio del gabinete K, es el contraste entre lo que poseen los hijos de Cristina con su tía. La diferencia es abismal. Florencia y Máximo tienen un capital heredado 126 veces más grande que el de Alicia, la más pobre del gabinete.
  La cuñada de la Presidenta declaró bienes por un total de $ 124.622, lo que equivale al valor de un modesto departamento en la Capital Federal. Los hermanos Kirchner se repartieron, en partes iguales, departamentos, terrenos, locales y casas en Río Gallegos, El Calafate y Buenos Aires. También acciones de sociedades como COMA, Hotesur y Los Sauces, más dinero en cajas de ahorro y plazos fijos en pesos y dólares. Con la sucesión de bienes, Cristina quedó con un patrimonio sensiblemente inferior al que tenía. Pasó de más de 70 millones de pesos a poco más de $ 39 millones.
Este año, muchos de los ministros que tenían sus ahorros en dólares tuvieron que convertirlos a pesos, por decisión de la Presidenta, que fue quien tomó la iniciativa. CFK pasó un plazo fijo de tres millones de dólares a la moneda local y sus subordinados entendieron el mensaje. Un ministro que dialogó con PERFIL dijo que aprovechó la ocasión para el consumo local. “Me compré una camioneta nueva, y metí un plazo fijo en pesos”, indicó, contento, porque había cumplido con el mandato de la jefa de Estado. Es que gran parte de las medidas económicas que está tomando Cristina en los últimos meses están orientadas a “pesificar” la economía en los hechos. “La idea es que los argentinos empiecen a pensar en pesos”, confesó en su momento el senador Aníbal Fernández. Y, como consecuencia, eliminar la cultura del dólar, a la que los argentinos se aferraron siempre por la devaluación de la moneda local. Una de las medidas centrales en ese sentido es el cepo al dólar, que genera rispideces en la opinión pública, sobre todo porque la normativa cambia en forma permanente y las explicaciones están ausentes.
Por eso, en las declaraciones juradas del año entrante seguramente, y si es que todos los ministros cumplieron, ninguno tendrá dólares.

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