NAC. El jueves a la noche hubo una alarma por la lipotimia de Cristina Kirchner

El llamado se hizo desde Presidencia para reservar un espacio en el centro neurológico. Hicieron un gran despliegue. Al final no se presentó. ¿Qué pasó?.

Otra vez el misterio y la alarma envuelve un episodio de lipotimia padecido por CFK.Ayer, Cristina Kirchner reapareció en público para encabezar un acto en la Casa Rosada, tras dos días de reposo. Desde el Salón de las Mujeres del Bicentenario reiteró el reclamo por la soberanía de las Malvinas y defendió la militancia juvenil (Ver aparte). El miércoles, la jefa de Estado había sufrido una caída brusca de su presión sanguínea (de 9/6 a 7/5) y se había sentido al borde del desmayo. Ocurrió después de realizar su rutina diaria de ejercicios en la cinta y tuvo un cuadro de deshidratación, según informaron los escuetos partes médicos oficiales. La Unidad Médica le indicó reposo por 24 horas. Sin embargo, ella suspendió su agenda durante dos días. El jueves a la noche algo pasó, cerca de las 21, médicos de la Clínica Fleni de Belgrano recibieron la orden de reservar una habitación para la Presidenta. Los enfermeros prepararon un despliegue para la ocasión, pero todo quedó en la nada. La información fue confirmada a PERFIL por dos fuentes de Fleni. No se sabe si fue una falsa alarma o si Cristina Fernández pudo contener su problema en otro sitio. Pero fuentes extraoficiales explicaron que cuando la mandataria tiene cualquier tipo de problema por razones “protocolares” se reservan habitaciones en clínicas. Incluso, en más de una. “Por si llegara a pasar algo. Es por las dudas”, dijeron. ¿Por qué, si el malestar surgió el miercoles a las 9 de la mañana, recién el jueves a la noche se habría de cumplir con este protocolo médico? ¿O de pronto su cuadro empeoró ese jueves? El kirchnerismo tiene una estrategia de comunicación cerrada y el cepo es aún mayor cuando se trata de la salud de la mandataria. Todo se convierte en secreto de Estado. Se informan pocas cosas, con partes escuetos, a pesar de que la salud presidencial es un tema de interés nacional. Sin contar con que no hay conferencias de prensa para poder evacuar dudas en situaciones muy importantes. En Fleni no hay suite presidencial, pero sí cuartos para ejecutivos o personas importantes. El Gobierno utiliza el hermetismo como un escudo protector. En septiembre de 2010, cuando Néstor Kirchner fue operado en el Sanatorio Los Arcos, la información no salió a la luz a través del vocero presidencial, sino que se filtró desde adentro de la institución médica. Lo mismo pasó con Máximo K. Se decía que había reservado una habitación en el Hospital de Santa Cruz, luego fue trasladado de urgencia a Buenos Aires en el Tango 01, y tras varias horas se difundió que se lo había operado de la rodilla.
Cristina sufrió varios cuadros de hipotensión (lipotimia) desde que es Presidenta. Y lo máximo que hubo fueron comunicados de dos párrafos de la Unidad Médica Presidencial. Muchos cuestionan el estilo. Creen que la salud de la jefa de Estado es un asunto de importancia pública. Ayer, funcionarios consultados por este diario desconocían tal reserva de habitación en Fleni. PERFIL se intentó comunicar también con sus voceros, y no obtuvo respuesta.
En enero de 2009, por un cuadro de lipotimia, CFK estuvo una semana en reposo. y suspendió un viaje a Cuba. Padeció tres veces más cuadros de lipotimia el año pasado. Este año, CFK fue operada de la glándula tiroides, por un tumor que, supuestamente, era maligno. Finalmente se descubrió que no. En mayo, CFK estuvo 48 horas en reposo por una gripe. Y el miércoles cayó con hipotensión una vez más. “La hipotensión arterial suele ser un signo físico que muy pocas veces traduce una enfermedad grave o implica un alto riesgo”, explicó Daniel Flichtentrei, médico cardiólogo, director de editorial Intramed. Y agrega que “con las condiciones predisponentes muchas situaciones pueden operar como gatillos o desencadenantes. Las más frecuentes son las que producen agotamiento físico o mental”. La función de CFK es de alta exposición al estrés y a las presiones de todo tipo. Además, la jefa de Estado ha sufrido hipotensión como producto de golpes de calor.
“No creo que la Levotiroxina, la droga que suple la función tiroidea, sea el desencadenante de una lipotimia”, precisó Eduardo Faure, endocrinólogo. La Presidenta reapareció ayer, y se la vio bien de salud.

Informe: Martina Rua y Florencia Ballarino.

La salud pública y los Kirchner
“Yo digo que hay sistema de salud pública cuando los presidentes se atienden en los hospitales públicos”, aseveró la Presidenta, Cristina Fernández, durante el acto que encabezó en el Sheraton esta semana. Sin embargo, la familia Kirchner no los utiliza. Para la operación de tiroides, Cristina fue al Hospital Austral. Al mismo lugar fue su hijo Máximo, por un problema en la rodilla. El ex presidente se sometió a una intervención en el Sanatorio Los Arcos. Todo esto, teniendo en cuenta que la jefa de Estado tiene a disposición una suite en el Hospital Argerich, que nunca utiliza. Es más, en el caso de Máximo habían solicitado una habitación en el Hospital de Santa Cruz y terminó siendo internado en el Austral.