A pesar de que el titular del
organismo negara la vinculación del vice con la quiebra de la imprensa,
el aval de Boudou fue clave para el salvataje de la compañía.
Un documento enviado por el titular de la AFIP, Ricardo Echegaray, al
vicepresidente Amado Boudou en 2010, cuando todavía era ministro de
Economía, compromete aún más al vice en la investigación por supuestos ilícitos en el caso de la ex Ciccone. Boudou es también investigado por enriquecimiento ilícito durante su gestión como ministro de Economía de la Nación.
En octubre del 2010 Ricardo Echegaray le pidió al actual vicepresidente que decidiera si otorgarle o no el salvataje a la empresa de Alejandro Vandenbroele, lo que demuestra que la intervención de Boudou fue "determinante" para sacar de la quiebra a la ex Ciccone Calcogáfica, ya que quince días después se aprobó la moratoria.
En marzo de este año, el titular de AFIP negó que Boudou hubiera intercedido para favorecer a la imprenta, pero de acuerdo con documentos oficiales difundidos hoy, que integran el expediente 1-257899-2010, él mismo lo habría consultado ante la posible quiebra de la compañía.
Tanto Clarín como La Nación publicaron las notas oficiales, fechadas el 25 de octubre del 2010, en donde Echegaray le informa al entonces ministro de Economía que la ex Ciccone le pedía una moratoria para pagar la deuda de 62,7 millones de pesos que tenía con el fisco, y le pide “su intervención” para determinar si se realizaba el salvataje financiero a la empresa.
En el documento, que ya está en manos de la Justicia, Echegaray notifica a Boudou que él no respondería sobre esa cuestión porque “ excede la competencia de (la) Administración Federal” y, por eso, pediría “su necesaria intervención”,especificando que lo que el actual vice decidiera sería "determinante".
La nota que envió Echegaray compromete aún más al compañero de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el Ejecutivo en el rescate financiero de la imprenta de Vanderbroele, controlada por la sociedad The Old Fund, la cual pagó viajes al exterior del hermano de Boudou y de su amigo y socio José María Núñez Carmona, y expensas a un departamento del funcionario.
En octubre del 2010 Ricardo Echegaray le pidió al actual vicepresidente que decidiera si otorgarle o no el salvataje a la empresa de Alejandro Vandenbroele, lo que demuestra que la intervención de Boudou fue "determinante" para sacar de la quiebra a la ex Ciccone Calcogáfica, ya que quince días después se aprobó la moratoria.
En marzo de este año, el titular de AFIP negó que Boudou hubiera intercedido para favorecer a la imprenta, pero de acuerdo con documentos oficiales difundidos hoy, que integran el expediente 1-257899-2010, él mismo lo habría consultado ante la posible quiebra de la compañía.
Tanto Clarín como La Nación publicaron las notas oficiales, fechadas el 25 de octubre del 2010, en donde Echegaray le informa al entonces ministro de Economía que la ex Ciccone le pedía una moratoria para pagar la deuda de 62,7 millones de pesos que tenía con el fisco, y le pide “su intervención” para determinar si se realizaba el salvataje financiero a la empresa.
En el documento, que ya está en manos de la Justicia, Echegaray notifica a Boudou que él no respondería sobre esa cuestión porque “ excede la competencia de (la) Administración Federal” y, por eso, pediría “su necesaria intervención”,especificando que lo que el actual vice decidiera sería "determinante".
La nota que envió Echegaray compromete aún más al compañero de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el Ejecutivo en el rescate financiero de la imprenta de Vanderbroele, controlada por la sociedad The Old Fund, la cual pagó viajes al exterior del hermano de Boudou y de su amigo y socio José María Núñez Carmona, y expensas a un departamento del funcionario.
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