Este jueves habrá una reunión en Buenos Aires donde el secretario de Transporte de la Nación definiría su implementación.
La Nación convocó a representantes del área de Transporte de todas las provincias para avanzar en la instrumentación del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) en el interior. Se trata de un esquema prepago que ya funciona en el Gran Buenos Aires y Capital Federal. Autoridades santafesinas confirmaron a Diario UNO que fueron invitadas y que concurrirán al importante encuentro.
Según dejaron trascender funcionarios nacionales, la idea es dejar de subsidiar a los usuarios a través de las empresas y dirigir esos beneficios directamente al pasajero. O sea, lo que se busca es orientar los aportes hacia las personas que realmente lo necesitan y dejar de “ayudar” a aquellas cuyo poder adquisitivo les permitiría pagar la tarifa completa.
Para utilizar el SUBE, los usuarios deben obtener una tarjeta magnética, que es personal e intransferible y se entrega de forma gratuita en puntos establecidos para ese fin. Asimismo, la puesta en marcha del sistema obligará a las empresas a instalar máquinas tickeadoras en sus unidades.
Así, con el sistema de cobro electrónico, los usuarios y las autoridades de aplicación tendrían datos certeros respecto a la cantidad de boletos que venden las prestatarias, información que hasta ahora solo se conoce por declaraciones juradas que elaboran las propias compañías de transporte.
El efecto directo de esta inminente decisión sería la eliminación de la tarifa generalizada: los pasajeros subsidiados pagarían menos que los que no tienen subsidios. La gran pregunta es cómo se implementará la nueva medida y cuál será su impacto. Y en este sentido, de un lado y del otro del mostrador, nadie sabe nada. Mientras tanto, el Gobierno ya anunció que podría modificar el contrato de concesión, que asegura las ganancias de los dueños de los micros a través del sistema de kilómetro recorrido.
Tanto el ministro del Interior, Florencio Randazzo, como el secretario de Transporte de la Nación, Juan Pablo Schiavi, ya señalaron que el nuevo sistema de tarjetas SUBE apunta a corregir las diferencias que hay entre las grandes empresas de colectivo que cobran millones de pesos y reciben gran cantidad de subsidios a través del combustible; se pretende que exista una distribución equitativa de los mismos y que llegue a los usuarios que más lo necesitan.
El SUBE permite abonar con una sola tarjeta viajes en colectivos, subtes, trenes y premetro en la llamada región metroplitana de Buenos Aires, pero en la página web del Ministerio de Planificación Federal se explica que el sistema es “un servicio integral diseñado para todo el país”. Aunque no esté claro si la idea va por ese carril, lo cierto es que en lo inmediato esa herramienta cambió la mecánica de subsidios en la principal área urbana del país, pasando de una aplicación en el gasoil a una aplicación en el pasaje.
En el encuentro de este jueves, que se realizará en la sede de la Federación Argentina de Transportadores por Automotor (Fatap) en Buenos Aires, se clarificará el modo en que la Nación trasladará a todas las provincias el sistema que ya se utiliza en Buenos Aires. La reunión estará presidida por el secretario de Transporte del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, Juan Pablo Schiavi.
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