STA FE: Por la bajante del Paraná piden precauciones en la navegación

Prefectura recomienda a las embarcaciones circular con prudencia. El nivel en el hidrómetro del puerto está 1,24 metros más bajo que el promedio histórico para esta época, que es 3,47 metros. La zona más riesgosa para navegar es el vado, cerca de Santo Tomé.

 

 Cuando la media histórica de enero, si se toma como referencia el lapso 1986-2010, es de 3,47 metros, el pasado miércoles 11 la altura del río en la terminal portuaria local alcanzó los 2,26 metros y hoy llegó a 2,23 según datos aportados por Prefectura Naval. Esta marca, implicó un bajante del orden de los 40 centímetros en 2 semanas.

Y lo que marcan los especialistas es que, pese a algunos repuntes temporarios leves (según el pronóstico del Instituto Nacional del Agua llegaría a 2,34 el 21 de enero y en Prefectura confirmaron que se esperaría un pequeño avance), los grandes ríos de la Cuenca del Plata se mantendrían en el trimestre con caudales inferiores a lo normal.

Aún cuando sostienen que un escenario crítico recién se generaría si el nivel del agua llegara a ubicarse por debajo de los 2 metros y que todavía no se registran grandes inconvenientes para navegar, desde la delegación local de la Prefectura Naval solicitan que las embarcaciones tomen precauciones.

Este consejo no es antojadizo: obedece a los bancos de arena o elementos extraños (como trozos de madera, de chapa, botellas de vidrio o incluso animales muertos) que pueden emerger como derivación de la marcada bajante y pueden generar colisiones o varaduras.

Según el prefecto Andrés Giraudi, jefe de la División Operaciones de la Prefectura Naval delegación Santa Fe, el caudal de agua ideal para esta época debería ser de 3,40 de profundidad. Sin embargo aseguró que, con la prevención necesaria para evitar colisiones y sin desarrollar altas velocidades, las embarcaciones deportivas pueden circular sin problemas. “La recomendación es la navegación de crucero”, indicó.

El prefecto destacó a su vez que, hasta el momento, el puerto opera con normalidad. De hecho, los barcos de gran porte pueden operar con esta altura del río -aunque demoran más tiempo para hacer las maniobras y tienen ciertas restricciones-, al igual que el servicio de barcazas y remolques, que lo hace en forma fraccionada, pero sin afectar el funcionamiento. “Ahora, de persistir esta bajante pronunciada obviamente que vamos a tener inconvenientes”, planteó.

Tras señalar que el panorama actual más que alarma exige prudencia, Giraudi señaló que un lugar clave a tener en cuenta es la zona del vado (desde el puerto local hacia Santo Tomé) donde se producen los mayores riesgos. “Es es una zona peligrosa para maniobrar en estas circunstancias que estamos teniendo”, admitió.

Tendencia

Al trazar un análisis de los escenarios hidrológicos que podrían observarse desde aquí hasta febrero en la Cuenca del Plata, el Instituto Nacional del Agua estima que para el trimestre enero-febrero-marzo “el caudal en la entrada al tramo argentino del río se mantenga muy acotado. En el tramo inferior del río y Delta se observarían niveles inferiores a los normales para la época”.

En otro párrafo, el informe sostiene que “sobre la base de la perspectiva climática para el próximo trimestre, se espera que el aporte de la cuenca alta y media se mantenga por debajo de los valores normales. No obstante, no se descartan repuntes de corto plazo en las nacientes ante eventos intensos de corta duración”.

Consultado al respecto, el prefecto Giraudi recordó que este año estamos dentro de un fenómeno Niña, que implica sequía. “Por el momento la tendencia es que persista esta circunstancia. Lo único que nos puede llegar a mejorar son grandes lluvias en esta región o hacia el norte”, señaló.

Emergencia

Ante la aparición de cualquier inconveniente, desde la Prefectura Naval sugieren dirigirse al teléfono 106 (Emergencias Náuticas) o a través del VHF, en el canal 12, que es el de la Prefectura Naval.