En las últimas 48 horas fueron
más de 200 los visitantes que acudieron a Buffa 1.280. Organizaron
horarios de visita y de rezo del Rosario y los dueños de casa reiteraron
que no se acepta ningún tipo de ofrendas materiales. Aún no hay una
explicación al fenómeno.
En las últimas 48 horas fueron más de 200 las personas que concurrieron a la casa de calle Buffa 1.280, donde habita el matrimonio conformado por Raquel y Néstor, una pareja oriunda de Santa Fe que llegó a vivir a Rafaela hace varios años, cuando por causa de las inundaciones perdieron su casa y todos sus bienes. Remándola desde cero, hoy la familia ya se encuentra en paz y establecida, gozando del aprecio de los vecinos del Barrio.
Ayer por la tarde el desfile de gente que llegaba a la casa era incesante -según comprobó un cronista de este Diario-, y a medida que la noticia se expande son muchos más los que se acercan a ver esa imagen de yeso que derrama lágrimas de sus ojos, a veces más profusamente, a veces menos y a veces nada. Lágrimas más grandes, otras veces del tamaño de un grano de arroz, las gotas descienden inexplicablemente -hasta el momento- desde los ojos de esa imagen traída de regalo desde el santuario de Itatí (Corrientes), por Soledad, una sobrina de Raquel que vive en Recreo.
PARTE DEL FENOMENO
A tal punto crece el fenómeno, que Raquel y Néstor tuvieron que colocar un cartel en el portón de alambre tejido estipulando horarios de visita y de rezo del santo Rosario.
Como para llegar hasta la vivienda donde está el altarcito con la imagen, hay que atravesar un patio delantero -ayer con barro-, colocaron también tablas de madera para que los peregrinos puedan caminar sin embarrarse, y debido a que muchos tocaban con sus dedos las pequeñas lágrimas de la Virgencita, la están por colocar en un cofre de vidrio preparado especialmente.
Dado el cariz del acontecimiento, Soledad Sánchez (23), la sobrina de Recreo que le regaló la imagen a Raquel, estaba ayer en Rafaela y comentó que "cuando la compré en un puesto callejero de Itatí el 16 de julio, esa imagen de yeso era igual que las demás, pero la miré bien y me la traje para mi tía". Agregando que "la bendijeron como tres o cuatro veces".
Desde el día martes último -y ahora todos los días a las 7:30- comenzó a rezarse en la vivienda el santo Rosario entre los peregrinos que llegan a esa hora, que desde el primer día fueron más de veinte y cada vez son más.
"Este domingo lo rezaremos a las 18:00" señaló Raquel, a la vez que repitió que "me gustaría que venga algún sacerdote -hasta el momento no fue ninguno-, para que me explique el significado de esas lágrimas. A lo mejor es una señal, yo creo mucho en Dios y en la Virgen".
Para describir la simpleza de la Fe de Raquel, basta comentar el hecho de que esta semana aprendió a rezar el Rosario, ya que antes rezaba con sus propias palabras -o también Padrenuestro y Ave María- pero hasta allí llegaba su catecismo de plegarias.
VISITAS
Los horarios de visita organizados para que la gente pueda rezarle a la Virgen, fueron establecidos por los dueños de la vivienda, de lunes a viernes de 7:00 a 12:00 y de 16:00 a 20:00. El sábado de 8:00 a 11:30 y de 17:00 a 19:30, y el domingo a las 18:00 rezo del Rosario. Repitieron una vez más que no se acepta ningún tipo de ofrenda material, y que la gente no insista en este aspecto.
Se recuerda que el inicio de este fenómeno sucedió el 2 de enero cuando según comentó Raquel, "ese día -dijo- al empezar a rezar vi que algo le brillaba en la cara y mi hermana vio que eran lágrimas. De inmediato me agarraron escalofríos y pegué un grito. Llora de a ratos, a veces menos y otras veces es impresionante", sostuvo. A la vez que humildemente interpretó que "creo que la Virgen debe estar sufriendo por todo lo que está pasando en la Argentina y en el mundo, y también porque hay mucha falta de Fe", concluyó.
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