¿El “Bichi” hasta los 40 años?-No es seguro que el ídolo se retire en seis meses

El “Polaco” Bastía se recupera bien aunque no debe hacer fútbol. El tesorero sabalero le regaló un banderín de Colón a Cacho Castaña. Chevantón “peló” a los pibes Fernández y Mehring.

 

 Casi pasó una semana desde la llegada de Colón a esta ciudad. Madrugones, mucho esfuerzo en los primeros días, un poco de afloje luego, el doble turno que se hizo “religión” hasta hoy, los primeros movimientos futbolísticos que se hicieron en la Villa Marista y la insistencia, en los trabajos con pelota en espacio reducido, en la tenencia y la presión para recuperar lo antes posible el balón. Se espera ahora el partido contra Tigre del martes en una de las canchas de la Villa marplatense. Al día siguiente, el regreso a Santa Fe donde se completará el trabajo y vendrán otros seis amistosos, entre ellos el torneo internacional en Rosario que dará comienzo el 27 y culminará el 29 de este mes.

Y trabajó el doctor...

Para “Lalo” Vega venía muy tranquila la pretemporada hasta que Graciani chocó con Bastía en forma totalmente involuntaria, le cabeceó el hombro, lo hizo caer y golpeó el “Polaco” con mucha fuerza contra el piso. Se temió la posibilidad de una fractura de clavícula y por eso el susto primario del médico sabalero, pero luego llegó la tranquilidad: fue sólo un golpe. Bastía se perdió un solo entrenamiento, que fue el del jueves por la mañana. Por ahora no hará fútbol, pero como la recuperación es excelente, se estima que para el torneo de Rosario estará en óptimas condiciones para jugarlo.

El otro inconveniente se dio ayer, con algunos jugadores con trastornos estomacales, entre ellos el “Bichi” Fuertes. Cuando le preguntamos a Eduardo Vega cuáles eran los puntos de comparación entre estas pretemporadas y las que él hacía cuando jugaba en Colón en la segunda mitad de la década del 70, señaló que no tienen nada que ver. “Lo que se corre ahora es muchísimo más que lo que hacíamos nosotros”, dijo “Lalo” a El Litoral.

¿Hasta cuándo el Bichi?

En una entrevista que concedió al colega Angel Cappelletti, uno de los periodistas presentes en la Feliz para seguir de cerca la actividad sabalera, el goleador histórico y el de mayor cantidad de partidos jugados con la rojinegra dejó entrever la posibilidad de seguir jugando, al menos hasta fin de año. “Si clasificamos para la Sudamericana, me encantaría jugarla”, dijo el “Bichi”.

Para ello, Arsenal deberá superar la primera fase o bien que Tigre no consiga zafar del descenso y la Promoción, algo bastante complicado para el equipo de Arruabarrena. Además, Fuertes elogió a Chevantón y admitió que “en el tema de la Virgen se cometieron errores”. Se lo nota muy bien al “Bichi”, quien el 26 de diciembre pasado cumplió 39 años. ¿Será un “cuarentón” adentro de una cancha de fútbol?, puede ser.

Banderín para “Cacho”

En el Hotel donde concentra Colón (el Hermitage), también paró “Cacho” Castaña, uno de los artistas que se presentó anoche ante una verdadera multitud en el Paseo Hermitage, a la altura del balneario Las Toscas de esta ciudad. El popular cantante no se cansó de sacarse fotos con todos, charló con el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli, quien también estuvo en el citado hotel, y luego recibió con mucha sorpresa y agrado el banderín de Colón, entregado por el tesorero del club, Carlos Marín.

“Hace mucho que no voy a Santa Fe”, dijo “Cacho”, quien es fana de San Lorenzo. “Soy amigo de Victorio Nicolás Cocco y no puedo olvidarme de aquellos grandes equipos, de los Carasucias y de ese en el que jugaba Facundo, Omar Higinio García y el Nene Sanfilippo, un goleador impresionante”.

Al lado de Cacho Castaña, inseparable, estuvo siempre su médico personal, el doctor Alfredo Cahe, quien atendió a Diego Maradona en el peor momento de su estado de salud. También se lo vio en el lobby al “Muñeco” Mateyko, quien estuvo conduciendo junto a Sergio Goycochea el espectáculo de anoche en el Paseo Hermitage, que tuvo a Carlitos Tevez como invitado sorpresa: fue ovacionado, autografió pelotas y se las tiró a la multitud.
“Este jugaba bien de verdad”

Diego Osella es el segundo ayudante de campo que llegó a Colón para reemplazar al “Zurdo” Verdirame, quien por problemas personales se quedó en México, donde reside su familia. Osella jugó en Newell’s, fue dirigido por Bielsa y también por Yudica, no alcanzó a compartir el plantel con Batistuta pero sí lo hizo con Mario Sciacqua. “Marito jugaba bien de verdad, saltaba una barbaridad a pesar de que no es alto y era un delantero potente y temible”, dijo Osella, quien viene de dirigir en Chile.

“Cuando recibí el llamado de Mario me preocupé porque mis colaboradores no se queden sin trabajo y acá estoy. Es una apuesta fuerte, porque yo estaba dirigiendo, pero a la vez superadora. Hay que asumir riesgos”, le dijo a El Litoral en una charla informal. Se nota una muy buena onda también en el cuerpo técnico, que se prolonga en la relación con los jugadores.