STA FE; En la cuenca lechera se sufre la falta de lluvias

Los tamberos aseguran que se están terminando las reservas de alimentos y eso baja el nivel de la producción. Entre las heladas y la falta de agua, los campos quedaron pelados. El cambio de la alimentación genera más costos.

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 El fin de semana pasado estaban anunciadas lluvias en el centro norte de la provincia, una de las zonas del país que está afectada por la sequía. Pero las tormentas pasaron de largo y la situación, sobre todo

para la producción agropecuaria,es cada vez más complicada.

El extremo noroeste es la región más afectada por la falta de agua. Pero también hay otras áreas como el norte de la cuenca lechera que también están acusando el golpe de la falta de humedad en el suelo.

Si bien en esta región el ganado tiene agua para beber, la escasez de precipitaciones jaqueó los cultivos de alfalfa y el alimento para las vacas comenzó a mermar. En los tambos la ecuación es muy simple:
menos alimento, igual a menos producción.

“En general en la cuenca lechera está todo bastante seco”, le dijo a Diario UNO el productor Facundo Bonaldi, quien tiene sus campos en la localidad de Suardi, departamento San Cristóbal, quien agregó:
“Acá hace bastante que no llueve y tratamos de aprovechar cada alfalfa que brota para poder darles de comer a las vacas que tenemos en el tambo”.

Al ser consultado sobre cómo repercute esta sequía en la producción tambera, Bonaldi expresó: “Lo que más nos complica es la alimentación. Porque nosotros en los veranos hacemos las reservas
de alimentos para el invierno y ya no nos está quedando nada, ni heno, ni rollos ni silos. Por eso tenemos que implementar otras cosas y empezar a darles pellets, urea para que incorporen nitrógeno”.

“Cambiarle la alimentación es sumar costos a la producción de leche. Además, la vaca no tiene el mismo rendimiento que si estuviera comiendo pasto. Por eso, para no bajar tanto en la producción tenemos
que incorporarles nitrógeno,los pellets de soja y de maní para poder ordeñar casi lo mismo. Pero con muchos más gastos”, aseguró el productor, quien dijo aún no tener hecho el cálculo preciso de cuánto
se le encarece la producción.

Luego, para graficar lo que significa la seca que se está soportando en la zona de Suardi, Bonaldi relató: “Nosotros el año pasado, el 4 y el 5 de septiembre habíamos sembrado un maíz de primera
temporada. Hoy ni amagamos poder sembrarlo, porque con la sequía que hay no movimos nada de tierra”.

“En lo que tiene que ver con los cultivos ya tendrían que estar sembrados los maíces, aunque todavía  se puede esperar un poco”, aclaró Bonaldi y añadió: “Pero necesitamos hacer los granos para darles de comer a las vacas. Muchos están apelando al silo para poder alimentarlas, pero las reservas se terminan y las vacas ya deberían estar comiendo pasto, y no hay nada para darles”.

Se viene el calor
El fin de semana, cuando todos esperaban aunque sea algo de agua, las precipitaciones nunca llegaron.“Ahora vienen las altas temperaturas porque están anunciados 38 y 40 grados para los próximos días. Pero de lluvia nada. Dicen que va a refrescar el fin de semana, pero de agua todavía no tenemos noticias”, sostuvo.

La llegada de una ola de calor a la región no deja de ser un agravante a la situación que se está atravesando. “Hoy el calor nos complica. No tenemos sombra, no tenemos pasto. El animal necesita la sombra
de las plantas para protegerse del sol. Sino tenemos que hacerles sombrillas con lonas o techos con chapas. Las plantas están peladas por las últimas heladas. No largan ni una hoja”, aseveró.

“Además –concluyó–, cuando la tierra empieza a aumentar la temperatura, ni bien brotan las alfalfas el sol las quema. Al estar todo seco y haber un viento caliente con días que van a tener cerca de 40 grados, eso influye en esta situación de sequía”.