domingo, 8 de septiembre de 2013

CENTRAL PERDIÓ 2 A 0 CON SAN LORENZO Y EL GIGANTE DEJÓ DE SER INEXPUGNABLE

A los 40, Villalba puso el 2 a 0 tras una jugada muy discutida. Elizari había salido por un golpe y volvió al campo de juego, se la robó a Ferrari y habilitó a Villalba, quien eludió a un defensor y definió por sobre el cuerpo de García.
La Capital | 

Central perdió 2 a 0 ante San Lorenzo en partido por la 6ª fecha del torneo Inicial. Los goles del ciclón fueron de Cauteruccio en el primer tiempo y Villalba en el segundo.
CENTRAL PERDIÓ 2 A 0 CON SAN LORENZO Y EL GIGANTE DEJÓ DE SER INEXPUGNABLE
Cuando apenas si San Lorenzo había insinuado su vocación por el manejo de balón, la jerarquía de Abreu emparejó los tantos. Primero se la bajó de cabeza a Niell, y del rebote de esa jugada la picó por sobre la cabeza de Torrico, y la pelota quedó en el techo del arco.
Con Ruiz, Elizari, Romagnoli y Ortigoza en la mitad de cancha el planteo visitante está más que claro aunque se requiere de una precisión que aparece en cuentagotas.
Central encima a los rivales en su propio campo y luego intenta la contra rápida, que le da sus réditos, porque a la picardía del Loco se le suma un derechazo de Nery apenas desviado y un cabezazo de Niell que hizo volar a Torrico para sacarla la córner.
Recién a los 20, el Ciclón apareció por los dominios del arquero local. Un remate de Buffarini tras una buena combinación en ataque con Romagnoli obligó al Melli a mandarla al córner. Del tiro de esquina, Cauteruccio la empujó al gol pero con la mano, no obstante fue un aviso. Porque después de un remate de Ruiz que contuvo García, Cauteruccio elaboró una jugada monumental por izquierda, se llevó a la rastra a un par de defensores y pisando el área definió cruzado. Al minuto de esto el goledaor del campeonato debió dejar la cancha lesionado y Central se fue con todo al arco de enfrente.
Cada centro fue un estiletazo que hizo zozobrar al fondo azulgrana. Alrededor de los 40, la presión canalla fue asfixiante y su rival no podía salir, pero todos los intentos murieron en la testa de algún defensor o en las manos de Torrico.
En el complemento orejearon mejor las cartas y todo se hizo más equilibrado. Central, urgido por el resultado, dosificó su ímpetu y pretendió llegar más asociado a los dominios de Torrico.
Esto le quitó vértigo, aunque también San Lorenzo se plantó con mayor volumen físico que en el primer tiempo y empezó un partido de golpe por golpe, aunque más que nada fueron caricias y los arqueros fueron exigidos en forma más espaciada.
San Lorenzo abusó del disparo de media distancia, no siempre bien direccionado, mientras que Central se repitió en el avance por izquierda y el posterior centro.
El partido ganó en emotividad sólo en los minutos finales, cuando empujado por su público y viendo que las ideas no llegaban con nitidez Central puso toda su vergüenza y sus ganas de empatar.
Kanemann se jugó toda su humanidad en un cruce ante Medina y salvó su valla poco antes de los 40. El minuto que selló la suerte canalla en el partido, porque fue el segundo gol azulgrana, una magistral definición de Villalba, tras toque de Elizari.
Y allí viene la polémica: Elizari había dejado el campo de juego para ser atendido tras un pelotazo de Nery en el rostro, y la disputa es si fue autorizado a reingresar porque fue allí cuando le robó la pelota a Ferrari y construyó la jugada del gol ante el reclamo de todo Central.
El partido se detuvo unos minutos por la pirotecnia desatada por la hinchada canalla y luego siguió. Hubo más nervios que ideas, más amarillas que juego, más centros que fútbol del lado canalla. Y así no se puede.
Central perdió un bastión casi inexpugnable como lo era su estadio, sigue en la zona roja de los promedios y encima parece que extravió el norte de su juego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario