El ex director del FMI analizó que la moción de censura contra la Argentina es una “una tarjeta naranja” que podría derivar en una expulsión del organismo multilateral luego de un largo proceso. “La última vez que pasó fue en 1948, con Checoslovaquia, en la Guerra Fría”, dijo.
"Lo que es interesante es que el ministro (Hernán Lorenzino) y la Presidente estuvieron muy negativos, como me imagino que es lo normal, pero anunciaron esta nueva metodología para medir el índice de precios; de alguna manera están reconociendo que existe el problema”, declaró Claudio Loser, ex director del FMI, en Radio 10.
De ese modo se refirió a la reacción del gobierno argentino ante la moción de censura emitida por el FMI el pasado viernes, donde se alertó a la Argentina a modificar sus índices, especialmente el de precios. En una entrevista radial, Lorenzino anunció el sábado que este año lanzarán una nueva medición de inflación, con alcance nacional.
“Eso no nos da garantías de que se midan bien las cosas. Yo puedo tener la mejor máquina para hacer chorizos, pero si pongo carne que no es buena, los chorizos no van a salir bien”, reflexionó Loser.
El economista aseguró que la sanción contra la Argentina es “una tarjeta naranja” que “en la vida cotidiana de los argentinos hoy no va a tener ninguna implicancia”. Por lo pronto, la Argentina podría tener inconvenientes para pedir créditos en el Banco Mundial o en el BID, pero no es política de la actual administración solicitar asistencia financiera internacional.
La moción de censura es un paso previo a un proceso que podría derivar en la expulsión de la Argentina del FMI. “Ese proceso puede demorar un año y medio. La última vez que hubo una expulsión fue en 1948, a Checoslovaquia, en medio de la Guerra Fría”, recordó.
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