El Centro de Protección a la
Naturaleza (Cepronat) y las organizaciones de vecinos que impulsan la
campaña Paren de Fumigarnos lanzaron un comunicado de alerta a las
autoridades de la provincia y a la sociedad, para advertir sobre
amenazas a quienes luchan por su salud y su vida "ante la lluvia de
agrotóxicos que padecen".
La Capital |
Consideran que existe \"una campaña de intimidación dirigida a confundir
y amedrentar a los habitantes de los pueblos fumigados que exigen
resguardar su vida\", ante las consecuencias de las fumigaciones con
químicos para la agricultura.
Los ambientalistas denunciaron la reiteración de \"amenazas, señales
mafiosas y daños a propiedades de familiares de quienes intentan la
sanción de una normativa que implemente un modesto límite de 600 metros
para las fumigaciones en Carcarañá; aprietes descarados en Desvío
Arijón, con amenazas directas y circulación sigilosa de vehículos
todoterreno con vidrios polarizados y llamadas intimidatorias al
director de una radio de Ceres para que levante el programa de vecinos
de esa localidad y de Hersilia contra las fumigaciones\".
Modalidad. \"Esa parece ser la nueva modalidad de acción para evitar la
difusión del macabro balance, tras 15 años de agricultura tóxica\",
dispararon en un comunicado emitido ayer en el que aseguraron que \"el
incremento en la agresividad discursiva en recientes intercambios en
otras localidades como en Sunchales, evidencian que estamos frente a una
escalada tendiente a imponer por la fuerza lo que la razón niega\".
\"Queremos alertar que estos hechos no ocurren sólo por el desequilibrio
o la prepotencia de una ínfima minoría que, como vieja y repetida
fórmula, pretende imponer su poder de facto a golpe de bidón, sino
también por la inexcusable actuación de los poderes constituidos que
dejó a millones de compatriotas librados a su suerte\".
Desprotección. En ese marco, los proteccionistas renovaron el reclamo a
los parlamentarios santafesinos \"que con total desprecio por los
reclamos mayoritarios que demandan protección, se aprestan a dejar pasar
otro año sin modificar la vetusta y permisiva legislación vigente,
contemporánea del desembarco de la soja transgénica en el país\".
También cargaron contra el Poder Judicial provincial al que calificaron
como \"descomprometido, ajeno y distante\".
\"Es revelador que el caso Ituzaingó en la vecina Córdoba resulte el
primer antecedente de aplicación de la ley de residuos peligrosos,
vigente desde hace más de 20 años, no obstante la existencia de
numerosas denuncias de hechos similares en nuestra provincia, con el
broche de oro puesto por Sala II de la Cámara Civil y Comercial de Santa
Fe, recortando, contra toda la evidencia, el emblemático fallo San
Jorge\".
\"Desde los pueblos fumigados exigimos el esclarecimiento de los delitos
denunciados en estricto cumplimiento del mandato constitucional,
priorizando sus valores fundamentales por encima del lucro, aplicando
los principios precautorios y de prevención y juzgando, acorde a cada
nivel de responsabilidad. El mantenimiento de este estado de cosas, el
silencio cómplice o peor, el agravamiento de los padecimientos de las
víctimas, equivale a convalidar el regreso a la barbarie\", remarcaron.
Los testimonios. Paola Angeletti, cuyo caso fue expuesto por La Capital
esta semana, integra un grupo de vecinos autoconvocados de Carcarañá.
\"Luego de que un varios productores presionaran para que no se vote el
despacho de comisión del Concejo, que proponía prohibir todos los
agrotóxicos hasta una distancia de 600 metros, comenzamos con una fuerte
campaña junto a los vecinos para demostrar que somos una inmensa
mayoría quienes queremos que paren de fumigar. A los pocos días
aparecieron varios comentarios en Facebook de algunos productores y el 5
de junio, a las 9, rompieron el vidrio de la pizzería de mi viejo con
un piedrazo. Al día siguiente a la tarde tiraron un papel por debajo de
la puerta en el negocio de al lado de la pizzería con la leyenda: Sigan
jodiendo, te vamos a hacer boleta negra, cuidate”.
Jeremías, de Desvío Arijón, contó: “Recibimos amenazas por parte de
un productor que no es del pueblo. Luego de frenar la fumigación en su
campo terminamos en la comisaría donde, luego, llego él. Con total
impunidad empezó a gritar que con un tiro se arreglaba todo y lamentó
que no estaba presente cuando se frenó la fumigación”.
“Cuando quedamos solos dijo que se había juntado con los otros
sojeros a quienes también les frenamos fumigaciones y dijeron que hasta
que no nos vayamos del pueblo no van a parar, que saben nuestros
movimientos, que yo soy músico, que viajo, que tengo dos hijos y que
conocen los horarios de escuela del mayor y que lo lleva mi compañera.
Dijo que los cuide porque les iba a pasar algo”, recordó Jeremías.
“Hace cuatro meses merodeó por el campo una 4x4 con vidrios
polarizados en lugares y horarios donde se cruzaba solamente con mi
compañera e hijos. Fueron tres o cuatro días hasta que decidimos hacerlo
público y de ahí no volvió. Hasta que el mes pasado mi compañera vio
que entraba gente al monte donde vivimos. Cuando la vieron salieron
enseguida, se subieron a una 4x4 y se fueron. Este es un pueblo muy
chico, nos conocemos todos y esta gente no era de acá”, agregó.
Otra amenaza. Por su parte, Fernando, de Ceres, narró que recibió una
amenaza a través de un llamado telefónico anónimo al director de la FM
100.1 Libertad, Williams Papili, para que saque del aire el programa La
Tierra Sin Mal, que hacen los vecinos autoconvocados de Ceres y
Hersilia, donde informan todo lo concerniente a agrotóxicos y sobre una
ordenanza recientemente promulgada, que establece parámetros de
aplicación de los productos.
Al director “le dijeron que levantara el programa o si no lo iban a
reventar a palos, que no sabía con quiénes metía”, señaló Fernando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario