A partir de mañana, la
Intendencia comenzará a colocar 77 cámaras de videovigilancia para
monitorear el espacio público. Cuando termine el proceso, que demandará
unos dos meses, estarán en funcionamiento unos cien soportes en los
lugares más concurridos de la ciudad.
A partir de mañana, la Intendencia
comenzará a colocar 77 cámaras de videovigilancia para monitorear el
espacio público. Cuando termine el proceso, que demandará unos dos
meses, estarán en funcionamiento unos cien soportes en los lugares más
concurridos de la ciudad. "La idea es aportar a la seguridad ciudadana y
a prevenir situaciones conflictivas y de vandalismo urbano", destacó el
subsecretario de Prevención y Seguridad Ciudadana municipal, Luis
Baita. El municipio gasta 4 millones de pesos al año para reparar los
daños por destrucciones.
Actualmente hay 23 cámaras funcionando.
Las primeras 20 fueron instaladas durante la gestión del ex intendente
Miguel Lifschitz y las otras tres a comienzos de año en la costanera
norte, en especial para prevenir picadas de autos. De las 80 licitadas a
fines de 2011 quedan pendientes de colocación unas 77 que serán
emplazadas en los próximos 60 días, tras haber finalizado la empresa
adjudicataria con el proceso de conexión de la fibra óptica.
Baita confirmó que los primeros
espacios a privilegiar son los corredores donde funcionan los carriles
exclusivos, en las calles Santa Fe, San Lorenzo, Laprida y Maipú. "Allí
vamos a colocar unas seis cámaras que serán rotativas, y no fijas para
evitar que los ciudadanos sepan dónde están permanentemente y sólo
actúen correctamente en esas esquinas. Se trata de espacios
potencialmente conflictivos, no sólo en cuanto a faltas de tránsito sino
también a otras contravenciones municipales", remarcó el funcionario
para quien "sería importante que el Concejo acompañe el pedido de la
intendenta (Mónica Fein) para que el material captado por las cámaras
pueda ser utilizado para labrar actas y cobrar multas", que hasta ahora
no consiguió consenso entre los distintos bloques políticos (ver
aparte).
Según el referente de Prevención y
Seguridad Ciudadana, "a diferencia de lo que muchos plantean, las
cámaras no tienen un afán recaudatorio. Pero el registro de la
contravención, si no es sancionado, termina siendo anecdótico. Es
importante que pueda intervenir un juez de Faltas que, en base a las
ordenanzas vigentes, aplique después las multas que corresponden, de
acuerdo a la magnitud del daño causado, como ocurre con los radares de
tránsito".
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