Fue este domingo después de las 6,30 en la esquina de la avenida Blas Parera casi Gorriti. Asesinaron con varios balazos a Eduardo Roberto Herrera de 33 años. La víctima gozaba de los beneficios de la libertad condicional después de cumplir la mayor parte de una condena por homicidio.
Ayer, minutos después delas seis y media de la mañana, varios llamados telefónicos ingresaron a la central policial 911 denunciando que un hombre había sido baleado en Blas Parera y Gorriti de la capital provincial, cuando descendieron de un colectivo numerosas personas desde un bailable ubicado en el extremo sur de la ciudad de Recreo sobre la ruta nacional 11°.
Varios pasajeros descendieron del colectivo, uno de ellos puso un pie en la vereda cuando un joven se le aproximó, sacó un arma de su cintura, le apuntó a corta distancia y le disparó varias veces seguidas.
El hombre cayó malherido y ensangrentado, fue auxiliado por algunas personas que lo introdujeron en el hospital psiquiátrico Mira y López, los médicos que lo atendieron decieron trasladarlo al hospital Cullen, pero falleció en el trayecto. Fue identificado como Eduardo Roberto Herrera de 33 años, que era un presidiario que gozaba de libertad condicional, y purgaba una condena por homicidio de 11 años en la cárcel de Coronda.
Amanecer de un día lluvioso
Eran las seis de la mañana cuando el colectivo que tiene como pasajeros a todas las personas que concurren a un bailable ubicado sobre la ruta nacional N° 11 en el acceso sur a la ciudad de Recreo, trajo como pasajeros a numerosas jóvenes y estacionó frente al hospital psiquiátrico Mira y López de la ciudad de Santa Fe.
Eran las seis de la mañana cuando el colectivo que tiene como pasajeros a todas las personas que concurren a un bailable ubicado sobre la ruta nacional N° 11 en el acceso sur a la ciudad de Recreo, trajo como pasajeros a numerosas jóvenes y estacionó frente al hospital psiquiátrico Mira y López de la ciudad de Santa Fe.
Lo esperó para asesinarlo
Hasta ahí era lo que pasa cada fin de semana, pero en esta oportunidad, cuando un hombre de algo más de 30 años descendió a la vereda, un muchacho que estaba parado a un costado se llevó la mano a la cintura, sacó un arma de fuego y le disparó a quemarropa en varias oportunidades y lo impactó con tres balazos.
Hasta ahí era lo que pasa cada fin de semana, pero en esta oportunidad, cuando un hombre de algo más de 30 años descendió a la vereda, un muchacho que estaba parado a un costado se llevó la mano a la cintura, sacó un arma de fuego y le disparó a quemarropa en varias oportunidades y lo impactó con tres balazos.
La víctima cayó pesadamente a la vereda del hospital psiquiátrico Mira y López, y las personas que viajaron con él en el colectivo, lo socorrieron, levantaron del piso ensangrentado y agonizante y lo llevaron hasta la emergentología de ese nosocomio público santafesino.
Herrera murió en el camino
Los médicos de la sala de emergencia que recibieron a la víctima evaluaron la gravedad del caso y decidieron trasladarlo al hospital JoséMaría Cullen, dada la mayor complejidad de asistencia médica que le podrían brindar, pero Eduardo Roberto Herrera de 33 años, falleció en el trayecto cuando era trasladado por una ambulancia.
Los médicos de la sala de emergencia que recibieron a la víctima evaluaron la gravedad del caso y decidieron trasladarlo al hospital JoséMaría Cullen, dada la mayor complejidad de asistencia médica que le podrían brindar, pero Eduardo Roberto Herrera de 33 años, falleció en el trayecto cuando era trasladado por una ambulancia.
Denuncia del ataque a tiros
El suceso fue denunciado por todos los pasajeros del colectivo a la central policial 911 como a la guardia policial existente en el hospital psquiátrico Mira y López, con el aporte de la fisonomía y vestimenta que llevaba el asesino que atacó a balazos a Eduardo Herrera.
El suceso fue denunciado por todos los pasajeros del colectivo a la central policial 911 como a la guardia policial existente en el hospital psquiátrico Mira y López, con el aporte de la fisonomía y vestimenta que llevaba el asesino que atacó a balazos a Eduardo Herrera.
Antecendentes de la víctima
La víctima del crimen, Eduardo Roberto Herrera de 33 años, cumplió una condena por homicidio en una cárcel santafesina, y cuenta en su haber arresto por la comisión de distintos delitos contra las personas y contra la propiedad: asaltos a mano armada, tentativa de evasión, privación ilegítima de la libertad agravada por violencia con abuso de armas, resistencia a la autoridad y portación indebida de arma de uso civil y resistencia a la autoridad.
La víctima del crimen, Eduardo Roberto Herrera de 33 años, cumplió una condena por homicidio en una cárcel santafesina, y cuenta en su haber arresto por la comisión de distintos delitos contra las personas y contra la propiedad: asaltos a mano armada, tentativa de evasión, privación ilegítima de la libertad agravada por violencia con abuso de armas, resistencia a la autoridad y portación indebida de arma de uso civil y resistencia a la autoridad.
Peritajes criminalísticos
Agentes de la Policía Científica hicieron los peritajes y el cadáver fue llevado a la morgue judicial.
Agentes de la Policía Científica hicieron los peritajes y el cadáver fue llevado a la morgue judicial.
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