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DyN
El arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, advirtió hoy que "la situación social se agravó en los últimos meses" y lamentó que "no se buscan las causas profundas", al referirse a los distintos poderes del Estado que comenzaron a trabajar sobre los efectos de la multitudinaria marcha por la inseguridad, realizada el pasado jueves 25 de agosto.
Luego, agregó el Alto Prelado que "se está respondiendo a necesidades que hoy la sociedad siente como ausentes, por ejemplo que haya más seguridad, si bien por otro lado vemos las dificultades por la falta de trabajo. Rosario según las estadísticas está por encima de la media con 11,7 por ciento de desempleo, y eso no es un número, son personas, son familias que sufren".
"En algunas parroquias aumentó la demanda social y en otras no. En varias Cáritas hay alerta porque no estamos pasando los mejores tiempos. Hay preocupación, no sé si llegamos a una emergencia social. Es para estar muy atentos", precisó el religioso en declaraciones a radio Dos de Rosario.
En este contexto, el titular arzobispado rosarino dijo que "todavía los gobernantes no han encontrado la vuelta para el crecimiento tan esperado. Se venía de una situación difícil pero estos meses no le han encontrado la vuelta. Hay que trabajar sobre los efectos y las causas" y afirmó que "si hay más policías puede haber más disuasión del delito o si los jueces ponen más sentencias y las condenas se cumplen con mayor rigurosidad".
Por último, monseñor Martín expresó que "si hay trabajo para todos, las personas tienen una disciplina, un horario, y pueden llevar el pan a su casa. Lo que contribuye a evitar que quieran conseguir el dinero por vías que no corresponden. La Iglesia invita al diálogo pero no estamos para convocar. Para eso están las instituciones que tienen que realizar estas acciones", poniendo como ejemplo "el encuentro que encabezó el gobierno nacional para realizar anuncios sobre la lucha contra el narcotráfico".
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