Se trata de armamento de la policía en desuso. Seguridad había firmado un convenio con la Corte Suprema de Justicia a fin de destruirlas. Alguna de ellas aparecieron en manos de delincuentes.
Agenciafe |
Entre octubre y noviembre del año pasado, el anterior Ministerio de Seguridad con la gestión de Raúl Lamberto, ordenó destruir 700 armas que pertenecían a la Policía y estaban en desuso. Para ello, el ministerio había firmado un convenio con la Corte Suprema de Justicia a fin de destruirlas.
Pero, algunas de ellas terminaron en manos de delincuentes. Tras el descubrimiento se puso en marcha una investigación y ya fueron citados todos los responsables del circuito por el que pasaron, entre ellos personal policial del área Logística, aunque aún no hay nadie imputado.
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