Fue ayer a las 18 en Matheu al 100 y la playa. Santiago Saldaña fue emboscado y acribillado con 9 impactos de bala.
Ayer, minutos después de las 18, un joven identificado como Santiago Saldaña, de 27 años, fue ejecutado con 9 balazos que impactaron en distintas partes del cuerpo, en calle Matheu al 100 contra la playa de la laguna Setúbal, en el residencial barrio de Guadalupe.
Los vecinos denunciaron la intensa balacera a la policía y para cuando llegaron los primeros patrulleros de la agrupación Cuerpos y de la comisaría 8ª de Guadalupe, ambas de la Unidad Regional I La Capital de la policía santafesina, convergieron al lugar y se encontraron con el cuerpo de la víctima tirado de costado contra la embocadura de hormigón armado de un desagüe pluvial.
Posteriormente, arribó a la escena del crimen el médico de la repartición policial, que se encargó de constatar el fallecimiento y que la causa fueron los impactos de bala en su cabeza, en el tórax y en el abdomen.
Fue ejecutado a sangre fría
Los policías de las agrupaciones Cuerpos y Orden Público rodearon la zona, y con la llegada de los pesquisas de la División Homicidios comenzó la investigación del caso mediante el diálogo con los vecinos del barrio que aún no lograban sobreponerse de la tremenda noticia, en tanto, los agentes de la Policía Científica comenzaron con la realización de los peritajes criminalísticos de rigor: huellas y rastros, planimétrico, fotografía y balística.Estos últimos secuestraron y contabilizaron al menos 13 vainas o casquillos servidos de pistola calibre 9 milímetros.
Los policías de las agrupaciones Cuerpos y Orden Público rodearon la zona, y con la llegada de los pesquisas de la División Homicidios comenzó la investigación del caso mediante el diálogo con los vecinos del barrio que aún no lograban sobreponerse de la tremenda noticia, en tanto, los agentes de la Policía Científica comenzaron con la realización de los peritajes criminalísticos de rigor: huellas y rastros, planimétrico, fotografía y balística.Estos últimos secuestraron y contabilizaron al menos 13 vainas o casquillos servidos de pistola calibre 9 milímetros.
Las causas del crimen
Los investigadores policiales de Unidades Especiales de la UR I La Capital cuentan con la presunta secuencia de los últimos minutos de la víctima, antes de ser emboscado y ejecutado a balazos, y de esa manera lograron vertebrar la posible identidad del ejecutor a la que asociaron el uso de una pistola calibre 9 milímetros a la que le vacío el cargador de balazos y puso en evidencia la inquina que guió el homicidio.
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