El vicegobernador de Santa Fe, Jorge Henn, salió a objetar la propuesta de la presidente Cristina Fernández, de elegir por medio del voto a los integrantes del Colegio de la Magistratura. "La designación y remoción de los jueces es un debate central para alcanzar un Poder Judicial independiente de toda influencia, pública, privada o fáctica", indicó Henn.
La Capital |
El vicegobernador de la provincia, Jorge Henn, manifestó sus reservas con el proyecto de ley ingresado a la Legislatura santafesina para que la ciudadanía elija, a través del voto, a los integrantes del Colegio de la Magistratura.
La propuesta, ingresada a la Cámara baja por los diputados Eduardo Toniolli y Gerardo Rico, del bloque Movimiento Evita, está en concordancia con la iniciativa propuesta a nivel nacional por la presidenta Cristina Fernández en la apertura de las sesiones ordinarias del Congreso.
Si bien Henn celebró la discusión sobre las estructuras de poder, consideró que "la designación y remoción de los jueces es un debate central para alcanzar un Poder Judicial independiente de toda influencia, pública, privada o fáctica".
"Lo que hay que democratizar es la administración de la justicia, que no debe confundirse con elegir jueces amigos: la administración de la justicia se democratiza en la medida que permite el mayor acceso a la misma de los justiciables; en la medida de la extensión y eficiencia de sus servicios y en la medida que controla los abusos de poder", planteó el vice.
Sobre el proyecto presentado en la Cámara de Diputados de la provincia, Henn indicó que tal como se ha expresado, "la propuesta de elección popular de sus miembros parece por lo menos redundante: la voluntad popular a través de sus representantes está presente tanto en la nominación como en la designación de los jueces".
Del mismo modo, consideró que "puede haber algún cuestionamiento constitucional" al proyecto ya que el artículo 114 señala que (en el Consejo de la Magistratura), por un lado, están "los órganos políticos con representación popular" y, por otro, los jueces, los académicos y científicos, cuya designación es atribución de sus pares. "Esta y no otra es la voluntad de constituyente de 1994", dijo.
En ese sentido, el vicegobernador indicó que "los consejos de magistratura en todo el mundo han pretendido disminuir las designaciones políticas pura de los jueces, cuyas características muchas veces fueron la manipulación político partidista y discrecional de los gobiernos de turno, sin evaluar elementos técnicos, éticos y democráticos de los postulantes. Durante más de 20 años sucedió así en la provincia de Santa Fe".
Asimismo, recordó que, tal como lo estableció la Constitución nacional, "el Consejo de la Magistratura debe procurar el equilibro entre la representación de los órganos políticos resultantes de la elección popular, de los jueces, de los abogados, así como del ámbito científico y académico".
"Es decir —continuó— que en nuestro sistema la voluntad popular siempre está presente tanto con la representación de los poderes Ejecutivo y Legislativo en el Consejo, como con las propuestas del Poder Ejecutivo y la solicitud de acuerdo del Legislativo, ya que la Magistratura no designa jueces sino que los nomina o propone".
Menos condimentos. Al referirse a la situación de la Justicia provincial, donde la selección de los jueces de primera instancia, de los vocales de Cámara y de la Corte es atribución del Ejecutivo, con acuerdo de la Asamblea Legislativa, dijo que la transformación debe ir en dirección de relegar los condimentos políticos en la designación de los jueces, manteniendo los poderes Ejecutivo y Legislativo las facultades constitucionales que le corresponden.
Para Henn, "la politización de la Magistratura corre el riesgo de conformar «consejos de amigos», como los denominó el propio Eugenio Zaffaroni allá por el año 1994, cuando integró la Convención Constituyente nacional".
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