Miguel Angel Russo se está metiendo cada vez más en el corazón canalla. Por rasgos, capacidad de trabajo y temperamento logró encajar de lleno en el núcleo del sentir centralista. Si bien no consiguió títulos, supo dejar su huella en cada uno de sus cuatro pasos por la institución, trascendió la figura de conductor y forjó un vínculo sanguíneo con el hincha que distingue la esencia de su aporte.
La Capital |
Con la actual campaña, el técnico auriazul está buscando el camino de regreso a la primera división, batiendo récords en la categoría y elevando su condición de referente. En ese sentido, el lunes ante Olimpo, se convertirá junto a Enrique Palomini en el quinto entrenador con más partidos en la historia del club.
Con el próximo choque ante los bahienses, Russo alcanzará la marca de Palomini, un entrenador que dirigió a Central entre 1941 y 1947 y logró el ascenso a primera en 1942. Y con cuatro cotejos más, igualará la cantidad de Edgardo Bauza, otro peso pesado en la historia canalla contemporánea.
Los 146 partidos de Russo en Central comprenden 109 en Primera A en torneos regulares de la Asociación del Fútbol Argentino, 2 en la Copa Sudamericana 2003, 8 en la Copa Libertadores 2004, 2 en la Promoción que ganó ante Belgrano en la temporada 2008/09, 24 cotejos en la B Nacional y uno en la Copa Argentina contra Central Córdoba.
Como técnico de Central enfrentó a 47 rivales distintos. Tiene historial positivo ante 23 equipos, negativo contra 15; y ganó y perdió la misma cantidad de partidos ante 9 adversarios.
Russo transita su cuarta etapa en el club. Su primer partido fue el 13/7/97, cuando Central perdió 2 a 1 ante Huracán, en el Palacio Tomás Ducó. El gol canalla lo convirtió Omar Palma, quien esa tarde marcó su último gol con la camiseta auriazul.
Su primer ciclo comprendió desde el Clausura 1997 al Clausura 1998 (42 jugados con 16 triunfos, 12 igualdades y 14 caídas). El segundo fue desde el Apertura 2002 al Clausura 2004 (68 disputados, 26 victorias, 20 empates y 22 derrotas). El tercero fue en el Clausura 2009 (11 jugados, 5 triunfos, 2 pardas y 4 tropiezos). Y el cuarto arrancó con el actual torneo de la B Nacional (25 cotejos, con 15 halagos, 4 igualdades y 6 derrotas).
Entre sus datos más salientes figuran un 4 a 0 ante Newell\'s en el Apertura 1997, el paso por la Libertadores 2004 (llegó a octavos) y la Promoción ante Belgrano (2008/09) en la que conservó su lugar en la máxima categoría. Y bajo la efervescente óptica del fanático canalla, le reconocen que nunca perdió un clásico, ya que jugó 6, ganó 2 y empató 4.
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