El radical consideró un "exabrupto" el aumento del 60% propuesto por Lifschitz, a quien acusó de hacer el "trabajo sucio" antes de la asunción de Fein. Dijo que se debería tratar después de que asuman los nuevos ediles.
El concejal Jorge Boasso denunció presiones del Ejecutivo a los concejales para que aprueben los aumentos de la TGI y del boleto de colectivos, sostuvo que estas subas implican que el socialismo quiere realizar el “trabajo sucio” antes de que asuma como intendenta Mónica Fein el 10 de diciembre y opinó que al menos el tema de la tasa se debería postergar hasta que se produzca el recambio en el propio Palacio Vasallo.
Boasso, en diálogo con el programa La primera de la tarde, de Radio 2, cuestionó que pasadas las elecciones el intendente Miguel Lifschitz haya enviados los proyectos de aumentos y dijo que “no es agradable” para los ediles este tyema cuando falta poco para que el cuerpo cambie su composición.
El radical puso especial énfasis en la mitad de sus colegas que dejará sus bancas. “En los últimos 30 días de mandato pretenden que la mitad del cuerpo que se va levante la mano para aumentos que van a trascender esta administración”, enfatizó
Boasso entiende que “todos estos pedidos deberían ser tratados por la nueva composición del cuerpo, que es la que la gente determinó con su voto” en las elecciones de julio.
Además, consideró un “exabrupto” el 60 por ciento de suba del TGI que pidió el Ejecutivo.
En ese sentido, dijo que el aumento de los recursos con los que contó en sus ocho años la gestión Lifschitz ha sido “sostenido, constante y permanente”. “Siempre tuvo más recursos a fin de año que los que él mismo presupuestó a principios de año”, resumió.
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