Las 18 familias que permanecen ocupando las viviendas del barrio fueron atendidos por la Pastoral Social y presentaron una nota para presentar a Monseñor José María Arancedo, para que interceda en la negociación con el gobierno.
Diario UNO |
A dos años de la ocupación ilegal de viviendas en barrio Santa Rita II, aún quedan 18 familias que no aceptaron la propuesta de desalojo voluntario que el gobierno hizo hace unos meses. Para el día de hoy estaba programada la etapa final de desalojo, que fue finalmente postergada.
Según informó a Diario UNO el coordinador de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) Santa Fe (que acompaña a los ocupantes de las casa en el barrio), "los vecinos se reunieron esta mañana para preparar una nota para presentar a Monseñor José María Arancedo".
En la tarde de ayer, los vecinos decidieron hablar con los medios y dar a conocer sus situaciones particulares. Luego de esta iniciativa lograron ser atendidos por la Pastoral Social, "a la que pidieron interceda ante las autoridades para que no se de un desalojo forzado y se proponga una nueva instancia de diálogo".
"Por hoy suspendieron el desalojo, y nadie se acercó a hablar con los vecinos, que esperan que al menos lleguen los asistentes sociales para analizar sus situaciones particulares", dijo Saldaña.
La carta que presentaron en el Arzobispado
"Las 18 familias que habitamos el barrio Santa Rita II conformadas por 40 niños ( algunos con discapacidad), mujeres embarazadas y personas de efaf avanzada, les hacemos llegar esta nota para darle a conocer cuál es nuestra realidad.
Hace años, como miles de santafesinos venimos luchando por acceder a la posibilidad de una vivienda propia, En varias ocasiones nos hemos hecho presente en la dirección de vivienda y en el municipio con la esperanza de que algún funcionario entienda la situación por la que estamos pasando sin tener en ningún caso una respuesta positiva.
Queremos dejar aclarado que debido a nuestra situación económica nos hemos visto obligados a habitar este barrio desocupado por más de 5 años. Todos trabajamos, la mayoría no nos encontramos en blanco y no percibimos recibo de sueldos, por lo que no contamos con la posibilidad de acceder a la inscripción a los programas de vivienda que ofrece el estado.
Los oficios que desarrollamos los jefes y jefas de familia de este barrio son: empleada domestica, chofer de taxi, docente, empleado de comercio, empleado de la construcción, estudiante, enfermera, seguridad privada, empresa de telecomunicaciones.
NO pedimos que nos regalen nada, todo lo que tenemos lo hemos conseguido con el esfuerzo y el trabajo de nuestra familia. Creemos que el los gobiernos tienen que generar propuestas concretas para aquellos que no tenemos la posibilidad de cumplir con los requisitos que ellos exigen.
Por todo esto creemos que esta situación se puede resolver sin llegar a utilizar la violencia y por el medio del dialogo. Sería muy triste ver como nuestros hijos se quedan sin un techo. Desde ya estamos predispuestos a cualquier instancia que evite esta situación".
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