Finalizados todos los pasos administrativos, Aguas Santafesinas lo hará con quienes habían sido intimados a regularizar deudas contraídas con la compañía estatal pero que nunca las saldaron.
La Capital |
Finalizados todos los pasos administrativos, Aguas Santafesinas SA (Assa) llevará a la Justicia a 120 clientes no residenciales que habían sido intimados a regularizar deudas contraídas con la compañía estatal pero que nunca las saldaron. Y la cifra total se acerca a los 4 millones de pesos. De ese total de morosos, existen 40 casos a los que ya les cortaron el suministro por falta de pago.
Lo cierto es que a cada uno de esos clientes les iniciarán un juicio ejecutivo, lo que representará un considerable aumento en su deuda en materia de costas y honorarios profesionales. Ya en la instancia tribunalicia, la consecuencia final será el embargo o el remate de la propiedad. Los montos en cada caso oscilan entre los 50 mil y los 550 mil pesos.
Del conjunto de 160 morosos que integraron la primera etapa de esta acción, 40 respondieron a la intimación. De ese modo, se logró incluir en distintas modalidades de pago cerca de un millón de pesos de deuda original.
Para evitar el inicio de la demanda a los deudores se los intimó a regularizar su situación, ofreciéndoles facilidades de pago mediante diferentes planes de financiación.
Transcurrido casi un mes, ahora se iniciarán las acciones sobre los 120 usuarios no residenciales que no regularizaron su situación.
De hecho, se está trabajando en la elaboración de las demandas ejecutivas, que incluyen en cada caso el certificado de deuda y el estudio de título de propiedad de los inmuebles alcanzados.
Al martillo. Este último punto es importante porque la demanda debe establecerse contra el titular de la propiedad, llegado el caso trabar un embargo. La búsqueda no resulta sencilla ya que debe estar claramente identificado el actual dueño del inmueble.
En la compañía estatal indicaron que puede ocurrir que el cambio de titularidad no esté registrado en la base de datos de Assa, o incluso en el Registro de la Propiedad. También que se trate de inmuebles desocupados o de empresas fallidas, entre otras opciones.
En todos los casos de inicio de acciones judiciales, se trata de usuarios que mantienen importantes deudas de larga data: entidades deportivas, hoteles, sanatorios, heladerías y otro tipo de empresas que tienen al agua potable como insumo.
De esos casos, unos 40 deudores ya sufrieron el corte de la prestación de agua potable por tratarse de usuarios no residenciales.
La acción forma parte de las políticas encaradas por la actual gestión de Assa para recuperar deudas por servicios sanitarios, que incluyen planes de financiación accesibles de hasta 48 cuotas bimestrales, además de la posibilidad de pagar a través de sistemas electrónicos (Pagomiscuentas y Red link).
Desde hace casi un mes, Assa hizo foco sobre 160 grandes usuarios no residenciales que acumulaban gruesas deudas con un consumo promedio de 300 metros cúbicos bimestrales.
A cobrar. A la hora de definir los perfiles, los directivos de Assa se encontraron con situaciones en las que nunca se había pagado una boleta en los seis años de existencia de la empresa estatal.
Por eso, identificaron al menos diez morosos que registraron deudas de entre 50 mil y 550 mil pesos. Ahora, la vía judicial abre la esperanza de recuperar unos 4 millones por un servicio prestado por años, pero que nunca se pudieron cobrar.
Los 40 casos incluyen la merma del servicio (con la colocación de un reductor en el volumen de agua) y luego el corte de la prestación.
Pocos de ellos mostraron voluntad cierta de pago, al suscribir planes de cancelación que no pudieron levantar en el tiempo.
Como contracara al sector comercial, Assa tiene un nivel de cumplimiento de clientes residenciales que roza el 90 por ciento respecto del pago bimestral.
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