Alejandro Limia, figura de Unión
frente a Banfield, habló de la chance que se le dio de atajar por la
lesión de Enrique Bologna. “En mi cabeza siempre siento que soy el
arquero titular”, afirmó el guardameta tatengue.
Alejandro Limia se encontraba jugando el encuentro de Reserva frente a
Godoy Cruz cuando fue cambiado de urgencia, ya que Enrique Bologna se
lesionó en el calentamiento previo. El arquero de Unión en el ascenso
redondeó un buen partido frente al conjunto mendocino, mientras que en
la pasada jornada contra Banfield, fue la gran figura de la cancha,
tapando pelotas vitales para que el equipo rescate un buen punto para
seguir engrosando su promedio.
En la semana previa del partido ante Arsenal (club en el cual atajó entre 1999 y 2005), el Flaco dialogó con Ovación Radio, donde se refirió a su buen momento en el arco rojiblanco y dejó en claro que su idea es ganarse el puesto para lo que resta del Torneo Clausura.
“Trabajo siempre para jugar y para estar al servicio del equipo. Esta posibilidad me tomó muy tranquilo y sé que tengo que seguir trabajando de la misma manera”, contó el ex arquero de Arsenal, Huracán y Lanús.
—¿Cómo lo ves al equipo?
—La verdad que muy bien, el primer año siempre es muy difícil y complicado para los equipos que recién ascienden pero en líneas generales creo que las cosas se están haciendo muy bien. Estamos demostrando ser un equipo sólido, que va a buscar siempre los partidos, que vamos al frente siempre y eso es muy importante. El fútbol es el día a día y hay que ir partido a partido, por lo que no se puede pensar de acá a dos meses cómo estaremos. Hay que pensar en el partido que toca el fin de semana, en este caso es Arsenal y hay que tratar de ganarle. Obviamente que hay que soñar y en grande y tenemos que pensar que vamos a estar tranquilos en un par de fechas. Hay que ser conscientes que esto es muy duro y es un trabajo muy largo donde no hay que confiarse nunca.
—¿Te fijás en los rivales que pelean por no descender?
—La verdad que no, sólo pienso en el fin de semana y ganarle al rival de turno. Tenemos que quedarnos tranquilos en que dejamos todo en cada partido. A medida que pasan las fechas se miran las tablas y los números, aunque en lo personal no le doy mucha importancia.
“Arsenal está haciendo las cosas muy bien, estaban complicados con el promedio y lo solucionaron ganando varios partidos. Esa es también nuestra meta, obtener varios resultados positivos y ojalá el domingo se pueda dar”, dijo Limia.
—¿Cómo se puede dar el partido del domingo?
—Los viajes, como el que le toca a Arsenal, son muy cansadores. Yo jugué en Colombia que es muy cerca de Venezuela, sé que hay mucha humedad y es pesado jugar ahí. Ojalá que lleguen cansados y les cueste el partido, aunque son historias diferentes y no sé quiénes van a jugar ante Zamora y con qué equipo van a venir. Si sé que tienen varios jugadores muy buenos, cuentan con un gran recambio, están a la altura de Primera División y por algo están donde están en este momento. Es un equipo muy complicado, que no te regala nada, tiene siempre la misma mística, que la conservan de cuando jugaba yo. No los querés enfrentar por la forma en que juegan, está en nosotros ser inteligentes y romper todas las barreras que pongan ellos, debemos tratar que los jugadores importantes que tienen no manejen el partido y que sí lo podamos hacer nosotros.
—¿Hasta cuando tenés contrato con Unión?
—Hasta el 30 de junio.
—¿La idea es quedarte o preferís tener continuidad en otra parte?
—Me encantaría quedarme a vivir en Santa Fe, me siento muy cómodo en la ciudad, obviamente que si es trabajando en Unión mucho mejor. Pero el fútbol no tiene memoria, es el día a día y en este caso el único que tiene memoria es el hincha y me lo reconoció ante Godoy Cruz, para mí fue un verdadero orgullo (fue ovacionado por la gente). A mí me gustaría quedarme y seguir trabajando por estos colores, pero todavía falta mucho y no sé qué puede llegar a pasar.
“Vivo el presente y trato de disfrutar todo lo que puedo, físicamente estoy muy bien y ojalá que el tema de las lesiones me ayuden; creo que tengo para rato”, agregó el arquero.
Luego, el Flaco manifestó: “Siempre me siento titular y sé que estoy para aportarle al equipo, la decisión luego pasa por el entrenador que es el que manda. En este caso uno tiene que respetar esa decisión, aunque no la comparta. A mí siempre me tocó jugar y hoy me está tocando vivir una situación nueva, que no me gusta para nada pero tengo que seguir trabajando de la misma manera para tener un lugar.
Pero en mi cabeza siempre me siento el uno y el arquero titular”.
La capitanía de Rosales
—¿Qué te genera que Rosales haya sido capitán ante Banfield?
—Le pedí yo a Darío (Kudelka) que Paulo (Rosales) sea el capitán. Al técnico le gusta que a la cinta la lleve un jugador de campo por más que en el vestuario hable yo, respeto mucho esa decisión. No voy a ser más o menos capitán si llevo o no la cinta, una situación parecida también la viví en Arsenal con Jorge Burruchaga porque a él le gustaba que un jugador de campo sea el capitán. Me parece bárbaro que Rosales sea el capitán de este equipo porque se lo merece, es el jugador que nos está manejando futbolísticamente, es nuestro jugador distinto, hay que acaramelarlo porque si él está contento el equipo está bien.
En la semana previa del partido ante Arsenal (club en el cual atajó entre 1999 y 2005), el Flaco dialogó con Ovación Radio, donde se refirió a su buen momento en el arco rojiblanco y dejó en claro que su idea es ganarse el puesto para lo que resta del Torneo Clausura.
“Trabajo siempre para jugar y para estar al servicio del equipo. Esta posibilidad me tomó muy tranquilo y sé que tengo que seguir trabajando de la misma manera”, contó el ex arquero de Arsenal, Huracán y Lanús.
—¿Cómo lo ves al equipo?
—La verdad que muy bien, el primer año siempre es muy difícil y complicado para los equipos que recién ascienden pero en líneas generales creo que las cosas se están haciendo muy bien. Estamos demostrando ser un equipo sólido, que va a buscar siempre los partidos, que vamos al frente siempre y eso es muy importante. El fútbol es el día a día y hay que ir partido a partido, por lo que no se puede pensar de acá a dos meses cómo estaremos. Hay que pensar en el partido que toca el fin de semana, en este caso es Arsenal y hay que tratar de ganarle. Obviamente que hay que soñar y en grande y tenemos que pensar que vamos a estar tranquilos en un par de fechas. Hay que ser conscientes que esto es muy duro y es un trabajo muy largo donde no hay que confiarse nunca.
—¿Te fijás en los rivales que pelean por no descender?
—La verdad que no, sólo pienso en el fin de semana y ganarle al rival de turno. Tenemos que quedarnos tranquilos en que dejamos todo en cada partido. A medida que pasan las fechas se miran las tablas y los números, aunque en lo personal no le doy mucha importancia.
“Arsenal está haciendo las cosas muy bien, estaban complicados con el promedio y lo solucionaron ganando varios partidos. Esa es también nuestra meta, obtener varios resultados positivos y ojalá el domingo se pueda dar”, dijo Limia.
—¿Cómo se puede dar el partido del domingo?
—Los viajes, como el que le toca a Arsenal, son muy cansadores. Yo jugué en Colombia que es muy cerca de Venezuela, sé que hay mucha humedad y es pesado jugar ahí. Ojalá que lleguen cansados y les cueste el partido, aunque son historias diferentes y no sé quiénes van a jugar ante Zamora y con qué equipo van a venir. Si sé que tienen varios jugadores muy buenos, cuentan con un gran recambio, están a la altura de Primera División y por algo están donde están en este momento. Es un equipo muy complicado, que no te regala nada, tiene siempre la misma mística, que la conservan de cuando jugaba yo. No los querés enfrentar por la forma en que juegan, está en nosotros ser inteligentes y romper todas las barreras que pongan ellos, debemos tratar que los jugadores importantes que tienen no manejen el partido y que sí lo podamos hacer nosotros.
—¿Hasta cuando tenés contrato con Unión?
—Hasta el 30 de junio.
—¿La idea es quedarte o preferís tener continuidad en otra parte?
—Me encantaría quedarme a vivir en Santa Fe, me siento muy cómodo en la ciudad, obviamente que si es trabajando en Unión mucho mejor. Pero el fútbol no tiene memoria, es el día a día y en este caso el único que tiene memoria es el hincha y me lo reconoció ante Godoy Cruz, para mí fue un verdadero orgullo (fue ovacionado por la gente). A mí me gustaría quedarme y seguir trabajando por estos colores, pero todavía falta mucho y no sé qué puede llegar a pasar.
“Vivo el presente y trato de disfrutar todo lo que puedo, físicamente estoy muy bien y ojalá que el tema de las lesiones me ayuden; creo que tengo para rato”, agregó el arquero.
Luego, el Flaco manifestó: “Siempre me siento titular y sé que estoy para aportarle al equipo, la decisión luego pasa por el entrenador que es el que manda. En este caso uno tiene que respetar esa decisión, aunque no la comparta. A mí siempre me tocó jugar y hoy me está tocando vivir una situación nueva, que no me gusta para nada pero tengo que seguir trabajando de la misma manera para tener un lugar.
Pero en mi cabeza siempre me siento el uno y el arquero titular”.
La capitanía de Rosales
—¿Qué te genera que Rosales haya sido capitán ante Banfield?
—Le pedí yo a Darío (Kudelka) que Paulo (Rosales) sea el capitán. Al técnico le gusta que a la cinta la lleve un jugador de campo por más que en el vestuario hable yo, respeto mucho esa decisión. No voy a ser más o menos capitán si llevo o no la cinta, una situación parecida también la viví en Arsenal con Jorge Burruchaga porque a él le gustaba que un jugador de campo sea el capitán. Me parece bárbaro que Rosales sea el capitán de este equipo porque se lo merece, es el jugador que nos está manejando futbolísticamente, es nuestro jugador distinto, hay que acaramelarlo porque si él está contento el equipo está bien.
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