Luciano Zalazar, jefe de los Bomberos Voluntarios de Rosario, resumió con esas palabras las sensaciones de los rescatista tras casi una semana de intenso trabajo en Salta al 2100. "Las sensaciones fueorn muchas y muy cruzadas. No esperábamos la reacción de la gente", dijo.
.La Capital |
"Las sensaciones fueron muchas y muy cruzadas. Terminó un trabajo de muchos días. Por un lado lo vivimos con una angustia importante porque jamás perdimos la esperanza de encontrar alguna de las personas con vida y por el otro todo terminó con todas las personas fallecidas".
Así se expresó hoy Luciano Zalazar, jefe de los Bomberos Voluntarios de Rosario al describir lo que vivió anoche cuando se produjo el rescate de las últimas tres víctimas y se dieron por concluidas las tareas de salvataje de cuerpos.
Zalazar dijo que los rescatistas sienten "la tranquilidad de haber dejado todo. No se paró un instante la búsqueda. Fueron las 24 horas, rotando al personal . Por eso el sabor medio amargo, pero el broche fue la demostración de la gente que que no esperábamos".
"Nos agrupamos para que el gobernador y la intendenta nos saluden, y cuando cruzamos el vallado fue increíble la reacción de la gente. No lo esperábamos. Sin palabras la manera en que la gente de Rosario nos expresó su cariño", manifestó Zalazar.
El jefe de los Bomberos Voluntarios sostuvo que "iban pasando los días, hacía mucho frío y la situación se tornó compleja. Iban apareciendo las víctimas y de alguna manera eso generaba una especie de bajón anímico en todos. De todas maneras se seguía adelante. La gente nos esperaba del otro lado del vallado con bebidas calientes y con abrazos y palabras de aliento. Sin dudas, eso fue el motor para que no nos detuviéremos".
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