El paquete de medidas que tiene en estudio el municipio para restringir el ingreso de autos particulares al centro rosarino cosechó ayer más rechazos que adhesiones. Concejales del arco opositor, dueños de playas de estacionamiento y comerciantes cuestionaron la iniciativa por entender que no resolverá la movilidad de los ciudadanos y le endilgaron responsabilidad al Ejecutivo por no mejorar el transporte público.
La Capital |
Por su parte, un especialista en seguridad vial respaldó el proyecto. "No hay capital seria del mundo que te deje entrar con tu automóvil al microcentro", sentenció el médico Osvaldo Aymo.
La difusión del plan integral que está elaborando la Municipalidad para mejorar la movilidad en el área central disparó ayer una encendida polémica. La iniciativa, publicada ayer por La Capital, generó cuestionamientos y apoyos, garantizando así un debate acalorado desde abril próximo, cuando arranquen las audiencias públicas.
El esquema oficial incluye límites en el ingreso esa zona, segmentado de acuerdo a la terminación de la patente, la exigencia para que las cocheras del sector sean sólo mensuales y el empedrado de un sector del casco céntrico.
"La Municipalidad no tiene un plan concreto y experimenta en el tránsito sin medir las consecuencias", lanzó el concejal Diego Giuliano (PJ). Para el edil, la Intendencia "debería empezar por los temas de fondo: hacer estacionamientos disuasivos gratuitos en los bordes del centro y concretar un transporte público masivo".
Según Giuliano, "prohibir es lo más fácil, pero está visto que no funciona porque a los inspectores que piensa destinar el municipio para la restricción deberían aplicarlos a evitar la doble fila, las obstrucciones y, además, remover los corralitos y reparar los baches".
"En vez de seguir sosteniendo un modelo de transporte radial y colapsado, el municipio debería generar un modelo de transporte troncal con conectividad, sin restringir aún más la circulación. No se puede restringir el tránsito en el centro si no se resuelve dónde vamos a meter los autos y cómo transportarnos masivamente", remató.
No menos crítico fue el radical Jorge Boasso. "Si luego de 24 años de gobierno la propuesta socialista es restringir el ingreso de vehículos al centro, es el peor fracaso de una administración en cuanto al ordenamiento vehicular", sostuvo el edil.
"Para combatir la rabia proponen matar al perro", ironizó Boasso, tras lo cual agregó: "Pudieron haber diseñado un transporte multimodal, eficiente, que desaliente el uso del auto particular. Todo lo contrario, ahora quieren restringir los autos y convertir los estacionamientos en mensuales. Es una barbaridad, la administración de Mónica Fein todavía no asumió y evidencia que no tenían un plan serio para Rosario".
Para el presidente de la Cámara de Estaciones de Servicio, Garajes y Afines, Oscar Liberton, de concretarse el proyecto la actividad del sector se verá afectada y repercutirá en la disminución de puestos de trabajo.
"Nos preocupa mucho porque (la propuesta) debilita la rentabilidad de los comercios. Nos parece que hay que analizarlo bien porque no todo el mundo va al centro a comprar, y quitarles a todos la posibilidad de ingresar parece apresurado", analizó.
A su turno, Aymo se manifestó "totalmente a favor" de que se decida limitar el acceso al microcentro. "Siempre utilizo el transporte público de pasajeros y, realmente, resulta una barbaridad que se permita entrar en el microcentro de Rosario en auto, a cada uno con un auto", señaló.
En ese sentido, reclamó que se incorporen más unidades y mejor servicio. "Sí me parece una contradicción que se hable de restringir el uso del auto y no de mejorar el transporte público de pasajeros", enfatizó.
Luego descartó que aplicar el plan implique una caída en las ventas. "No hay capital seria del mundo que te deje entrar con tu auto al microcentro. Te hacen estacionar afuera y la gente va caminando, compra igual y continúa el movimiento comercial. Es una falacia eso de que van a caer las ventas", sentenció.
Vía Twitter, el presidente del Concejo, Miguel Zamarini, rechazó el cierre del microcentro que promueve el PJ por entender que impactará en las ventas. En cambio, destacó que las restricciones oficiales en estudio redundarán en mejoras en la circulación.
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