Leandro y su hijo se sentaron en el medio de la calzada de calle San Jerónimo, frente a los Tribunales locales, para reclamar una solución al calvario que los trabajadores de Productora Alimentaria padecen hace más de un año.
Un ex trabajador de la firma Naranpol empezó esta mañana una silenciosa protesta frente a los Tribunales de la ciudad capital. Junto a su hijo de cinco años, Leandro se ubicó en la intersección de las calles San Jerónimo y General López y se sentó en la mitad de la calle.
“No doy más. Hace un año que no cobramos un mango. Perdí todo: los muebles, la casa y nadie da una respuesta. No tengo qué comer y no quiero convertirme en un delincuente” dijo Leandro en un conmovedor testimonio que recogió LT10.
A su turno Cristian Farieri, delegado de los ex empleados, recordó que “después de todo lo que venimos pasando”, con una fábrica parada desde hace más de un año, “vemos que el Poder Judicial no resuelve. Se tiran la pelota unos a otros y el expediente está de un lado para otro”.
En el mismo sentido, se quejó de que los jueces que tuvieron la causa a su cargo no hayan definido decretar la quiebra como lo establece la ley. “Pasó mucho tiempo ya sin una respuesta, con un montón de necesidades y tanto los empresarios como los jueces quieren que la gente de bien pasemos a ser delincuentes”, insistió.
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