Un grupo de habitantes del
populoso barrio del norte de la ciudad denunció la preocupante situación
de las calles de la zona. "Ayer un motociclista se llevó por delante un
pozo y terminó en el hospital con serias lesiones. Además, los
colectiveros amenazan con dejar de circular por el mal estado de la
carpeta asfática", aseguró uno de los vecinos.
Los vecinos de Las Flores II no esconden su preocupación por el mal
estado de las calles del barrio y la innumerable cantidad de pozos que
se registran en la zona. Regimiento 12 de Infantería es la calle
principal y más transitada del barrio. A lo largo de la misma, hay más
de 50 negocios sumados a un centro comunitario, un dispensario, el
correo, la subcomisaría tercera, parroquias, centro de jubilados, la
escuela Malvinas Argentinas, entre otras instituciones, que se
incrementan día a día, al igual que los pozos.
Con frecuencia los vecinos de la zona son testigos involuntarios de una gran cantidad de accidentes. "Ayer estábamos esperando el colectivo con otros vecinos y vimos como un motociclista se llevó por delante un pozo. Por el terrible golpe, fue trasladado al hospital con lesiones graves", contó Alcides, un vecino de la zona a los micrófonos de Diario UNO.
"Los días de lluvia los pozos son trampas mortales para los conductores. Además los colectiveros amenazan con dejar de transitar por la zona por el pésimo estado de las calles", indicó Melba, otra de las vecinas preocupadas con la situación del barrio. "Teníamos una reunión prevista con el coordinador de la zona norte, pero se suspendió. Nuestro reclamo también se centra en la colocación de reguladores de velocidad, que la municipalidad se comprometó a instalar con el presupuesto participativo, al igual que las las garitas para esperar el colectivo", continuó agregando.
Con frecuencia los vecinos de la zona son testigos involuntarios de una gran cantidad de accidentes. "Ayer estábamos esperando el colectivo con otros vecinos y vimos como un motociclista se llevó por delante un pozo. Por el terrible golpe, fue trasladado al hospital con lesiones graves", contó Alcides, un vecino de la zona a los micrófonos de Diario UNO.
"Los días de lluvia los pozos son trampas mortales para los conductores. Además los colectiveros amenazan con dejar de transitar por la zona por el pésimo estado de las calles", indicó Melba, otra de las vecinas preocupadas con la situación del barrio. "Teníamos una reunión prevista con el coordinador de la zona norte, pero se suspendió. Nuestro reclamo también se centra en la colocación de reguladores de velocidad, que la municipalidad se comprometó a instalar con el presupuesto participativo, al igual que las las garitas para esperar el colectivo", continuó agregando.
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