El secretario de Coordinación de Eventos y Seguridad Deportiva, Pablo Farías, descartó que el tiroteo contra la trafic que trasladaba hinchas leprosos haya sido premeditado. Policías repasaban las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona para identificar a los sospechosos.
Rosario 3 |
El secretario de Coordinación de Eventos y Seguridad Deportiva, Pablo Farías, descartó que el ataque contra la combi de hinchas de Newell´s de este domingo haya sido premeditado. Sostuvo que el altercado que se produjo entre los pasajeros de la trafic y los motociclistas, que tuvo como saldo la muerte de dos personas, habría sido motivado por un cruce verbal “fortuito”, o bien por la rivalidad entre leprosos y canallas o por un altercado de tránsito, aunque exacerbado por la cuestión futbolística. Se repasaban por estas horas las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona para determinar la identidad de los sospechosos: uno de ellos habría vestido la casaca auriazul.
En diálogo con Radiópolis, el programa que conduce Roberto Caferra por Radio 2, Farías tildó como “un acto demencial” a la feroz balacera que sorprendió en Oroño y Lamadrid a una combi que transportaba hinchas de Newell´s a la salida del partido con Lanús.
Según las primeras informaciones a las que pudo acceder el funcionario –a partir de las declaraciones de los pasajeros de la trafic–, no fue una emboscada: “Se produjo primero un altercado entre la combi y las personas que viajaban en moto, lo que derivó en que la combi se detuviera y algunos pasajeros se bajaran”, precisó Farías, quien explicó que pasado ese primer intercambio de palabras la trafic siguió su camino. Fue recién a las pocas cuadras que los motociclistas abrieron fuego: descargaron 11 balas calibre 9 milímetros contra el rodado y mataron a dos personas, Walter Palacios y José Boladian; e hirieron a otras dos, una mujer de 29 años y una niña de 9.
Farías indicó que aunque en la esquina del tiroteo no hay cámaras de seguridad, la policía trabajaba con las filmaciones que pudieron recabar de dispositivos dispuestos en las cuadras de la persecución.
“Esto no fue un enfrentamiento entre hinchadas, algo que se haya podido evitar. Fue realmente una locura”, concluyó el secretario.
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