El anuncio de las autoridades echa por tierra las esperanzas de la oposición de remover al presidente por una vía pacífica y electoral, en un momento en que el descontento de los venezolanos frente al colapso económico asciende a un 80 por ciento.
El gobierno ha conducido a la oposición a un callejón sin salida. Cerrada la vía institucional, puede que a la oposición no le quede otro recurso que tomar la calle. “Y al gobierno, sencillamente, profundizar la represión”, dice el periodista venezolano Hugo Prieto.
El lunes, el gobierno de Maduro convocó a un diálogo nacional con la oposición para el 30 de octubre. Es, tal vez, el último intento para aliviar a un país agobiado y a una sociedad que no sabe cuanto más podrá aguantar.
Nytimes.com
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