Agencia DyN
El rubro de los automóviles y el de las joyas "son los sectores que mayormente se asocian con el consumo de lujos", según un informe elaborado por la Universidad Argentina de la Empresa (UADE).
En menor medida, aparecen los rubros de la tecnología, los relojes y el turismo, en tanto que la indumentaria y la cosmética "son categorías no asociadas con el lujo", indicó el sondeo realizado por el Instituto de Ciencias Sociales de esa universidad.
El relevamiennto detalló además que para el 39 por ciento de los encuestados el consumo de objetos suntuarios se asocia con el disfrute de la vida; el 30 por ciento lo vinculó al afán de demostrar un determinado poder; un 19 por ciento a la búsqueda de aceptación de los otros, y 12 por ciento al deseo de llenar vacíos existenciales.
"En las últimas dos décadas, El fenómeno del lujo ha cambiado al extenderse a las masas dando lugar a lo que muchos definen como una democratización del lujo. En la actualidad, la gran apertura hacia el consumo, la explosión de las marcas de lujo (sustentada por la acción publicitaria) y la expansión de los ideales del individualismo, han posibilitado un acceso masivo a toda clase de productos suntuarios, fenómeno impensable unas pocas décadas antes", señaló el análisis.
Según precisó, el 29 por ciento de los encuestados dijo que el rubro de los automóviles está asociado con el consumo de lujos, un 22 por ciento mencionó el de las joyas, el 14 por ciento aludió a la tecnología, y otra proporción igual al uso de relojes, en tanto que el 11 por ciento identificó al sector de turismo.
A su vez, puntualizó que el atributo mayormente asociado al lujo es el de la exclusividad (26 por ciento), el placer (15 por ciento), el dinero (14 por ciento) y la excelencia (13 por ciento).
"El usuario de productos suntuarios es percibido como alguien que depende de los objetos para ser feliz (22 por ciento); como una persona exitosa (21 por ciento), poderosa (19 por ciento) y decidida (16 por ciento)", señaló.
En particular, destacó que "las mujeres tienden a considerar a estos consumidores como personas poderosas (el consumo se asocia aquí con el poder sobre otros", mientras que los hombres los perciben "como personas decididas (el consumo se asocia en este caso con la seguridad en uno mismo)".
No hay comentarios:
Publicar un comentario