Ahora todo depende de Newell’s. Es que luego del empate 2-2 de anoche entre San Lorenzo y Rafaela, la punta del torneo les quedó servida a los rojinegros.
La Capital |
Ahora todo depende de Newell’s. Es que luego del empate 2-2 de anoche entre San Lorenzo y Rafaela, la punta del torneo les quedó servida a los rojinegros. Claro que para llegar a la cima de nuevo antes tienen que sacarse de encina a un rival muy duro como Arsenal en el Coloso. Eso sí, Newell’s debe recuperar su imagen de equipo confiable para tener reales pretensiones de lograr otra vez el título. Por eso lo único que importa a esta altura en el mundo leproso es volver a sumar de a tres para recuperar la punta.
Berti tuvo que barajar y dar de nuevo. Buscar las alternativas para rearmar el equipo que sufrió bajas por suspensiones y lesiones. Y esta vez escuchó la voz del pueblo y parece haberle dado la derecha, por lo menos para afrontar uno de los encuentros determinantes que le toca afrontar en el torneo y en casa por sobre todas las cosas. ¿Qué hizo? Decidió enviar a la cancha a Villalba en lugar de Mateo (ver aparte), en la modificación más resonante en una semana donde el plantel rojinegro tuvo que archivar la derrota padecida frente a Tigre.
El Loco sabe que está ante un desafío de carácter. De levantarse del golpe que lo relegó del liderazgo que ostentó durante medio campeonato y volver a ser el Newell’s sensación 2013.
Por eso buscó tener en cancha a sus soldados de mayor experiencia y de jerarquía. Se quedó sin Casco por suspensión y mandó a Díaz a cubrir ese lugar. La mala noticia que recibió el grupo fue la dura lesión de Tonso, lugar que volverá a ocupar Maxi luego de su paso por la selección nacional para enfrentar a Ecuador y Bosnia. Es uno de los emblemas y, sin dudas, su presencia en el equipo aumenta las chances de un triunfo rojinegro. En la semana Berti tuvo a Cáceres y López entre algodones, pero finalmente recibió el visto bueno del cuerpo médico y de los propios futbolistas para que pueda contar con ellos. Otra noticia para el DT en la final que le tocará afrontar en el Coloso. La cuestión pasaba también por Heinze, otro soldado que conoce a la perfección este tipo de batallas. Trabajó aparte en los entrenamientos con el fin de buscar alivianar la distensión en el sóleo izquierdo y estar entre los once de cualquier forma (ver página 7). El empate de San Lorenzo le sirvió a Newell’s la chance de recuperar la punta. Necesita ganar. Ahora depende de sí mismo.
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