Cuando me acuerdo que Mariano Savia hablaba de “la orgullosa escuela de Policía”, y quería una formación como la West Point, la Academia Militar de los Estados Unidos; y veo lo que hace ahora, realmente me causa nauseas y hasta me dan ganas de vomitar; un tipo que se decía estar en contra con esta nefasta gestión, ahora es parte de ella, y todo por dinero; dándole la estocada final a la institución, un moño para terminar con su destrucción.
Por Miguel ZALAZAR – UTRAPOL
Hay algo que se llama dignidad, uno puede estar equivocado, puede pensar distinto; pero no puede perder su dignidad; pero bueno, quizá jamás la tuvo Savia; y me hago cargo de lo que digo, porque fui uno de los que dije que ésta sería una gestión (la de Lifschitz) a favor de los policías; pero me equivoqué; y jamás hubiese formado parte de no haber obtenido resultados para quienes represento.
Pero, hay quienes se transforman, se arrodillan ante el poder, ante el dinero; y creídos de lo que sus oídos escuchan; se asocian a lo peor de la política; de esa que destruye;Mariano Savia cedió ante el vedetismo mediático, pese a que escondió su designación; porque le temía a tener que hacer frente a lo que es inocultable, ser parte de lo más nefasto que le toco a la institución policial.
El dinero cambia las ideas y te hace cómplice
El comisario general (RE) Mariano Luis Savia se vendió, él sabia que traicionaba sus principios, no le importó; es que creyó, pasaría desapercibido percibiendo algunas decenas de miles de pesos; acaso queriendo seguir gozando de los saludos de venia, ese del “saludo uno”; pero se equivocó, el saludo protocolar es solo eso; un protocolo al que un subalterno o subordinado se ve obligado; pero no es el saludo afectuoso, el que nace del corazón de camarada a camarada; algo que Savia jamás tendrá de aquí en más.
Las pruebas están a la vista, Savia hoy es uno de los ex jefes de policías mas odiado por los mismos oficiales jefes y superiores que alguna ves fueron sus alumnos; Savia cavo su propia fosa, o lo que es peor, paso a retiro de verdad; si hubiese una justicia como la militar, pediría que fuera degradado por entregador.
Mariano Savia es un crápula que le puso el broche a la entrega de la policía y los policías; esa mentira que instituyeron con tipos como el israeli Elias Soae, quien cobro cientos de miles de dólares para un proyecto llamado MULTIPOL, una truchada de manual que jamás podría aplicarse en Argentina y mucho menos en nuestra provincia, particularmente en barrios regados por la droga; que el mismo gobierno no desea combatir seriamente.
Mariano Savia es parte del cierre de un ciclo en la Policía de la Provincia que se recuperará una vez que tipos como él y otros impresentable dejen el gobierno para que lo asuman gente que realmente sepa y tenga compromiso con la sociedad santafesina.
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