El ómnibus transportaba 49 pasajeros, todos oriundos de Nápoles, cuando cayó unos 30 metros debajo de la autopista. Todavía no hay datos oficiales sobre el número de víctimas.
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El autobús regresaba de una peregrinación a Padre Pío, muy venerado en el sur de Italia, y se dirigían hacia Avellino en la noche del domingo. "La escena es trágica. En la carretera hay coches destruidos, al menos una decena. Y debajo hay unos 30 cuerpos cubiertos con sábanas blancas alineados en la carretera provincial", contó un testigo a la AFP.
Según los primeros datos sobre la cifra de muertos, los bomberos estiman que el número de cuerpos recuperados es de 38, de acuerdo con el periódico local Il Mattino y con la agenciaEFE.
El bus embistió a varios vehículos y tras caer de la carretera varios pasajeros salieron despedidos. El chofer, que habría tenido un problema en los frenos, perdió la vida al instante.
"La situación es crítica. Nuestros hombres están trabajando para salvar tantas vidas como sea posible", dijo el jefe del cuerpo de bomberos, quien confirmó que sólo 11 personas sobrevivieron y fueron hospitalizadas en estado de gravedad en el hospital de Avellino y otros municipios vecinos: seis mujeres, dos hombres y tres niños.
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