En estas semanas muchas familias recorren inmobiliarias para realizar las reservas. Qué hay que tener en cuenta y cuáles son los otros gastos a considerar al momento de instalarse en la ciudad.
Como sucede todos los años, desde mediados de enero muchas familias y grupos de jóvenes del interior llegan a la capital provincial en busca de departamentos y otros hospedajes a fin de comenzar la vida universitaria. Según un relevamiento realizado por Diario UNO, para instalarse en Santa Fe un estudiante necesitará, por lo menos, 3.191 pesos por mes; lo que representa un 16 por ciento de incremento respecto del monto estimado para el año pasado.
El gasto más importante es, como siempre, el del alquiler. Según las inmobiliarias, quienes llegan de otras localidades para instalarse en la ciudad a estudiar buscan, en su gran mayoría, departamentos de un dormitorio en las zonas cercanas a las facultades o institutos.
Pero ése no es el único gasto que tiene un estudiante. También se debe contemplar la compra del material de estudio, los colectivos, la comida, los impuestos y algunas actividades recreativas. El cálculo que realiza Diario UNO todos los años toma en cuenta los gastos básicos por lo que el monto es siempre un parámetro de base que no incluye erogaciones personales o específicas del tipo de carrera que se elige o del estilo de vida de los jóvenes.
Recomendaciones
Dónde alquilar, qué tener en cuenta sobre el contrato, cómo calcular los gastos y cuáles son los precios promedio son algunas de las dudas más habituales al momento de buscar un lugar en el que se va a vivir. Sobre todo si se trata de la primera experiencia que los adolescentes tendrán lejos del hogar familiar. Por eso, Marcelo Tomas –presidente de la Cámara de Corredores Inmobiliarios– señaló que siempre es recomendable contratar a través de inmobiliarias matriculadas.
“Santa Fe tiene una oferta académica muy importante. La cantidad de consultas que estamos teniendo desde hace una semana, aproximadamente, es una continuación de lo que estaba ocurriendo desde octubre y noviembre del año pasado cuando ya muchos chicos empezaron a averiguar”, explicó.
En ese sentido, marcó que lo más demandado son departamentos chicos, de un dormitorio, cercanos a las universidad y con bajos costos de expensas. “En general vienen de a dos pero buscan departamentos de un dormitorio para compartir”, detalló y agregó: “Los chicos que llegan a Santa Fe son muy exigentes y están muy bien asesorados. Tienen mucho conocimiento de locaciones”.
Entre las recomendaciones para los futuros inquilinos indicó que es necesario que se aseguren de que las unidades habitacionales estén en condiciones y que el contrato refleje la realidad de lo que contiene el inmueble y el estado de conservación del mismo.
Por otro lado, es importante no demorar demasiado la búsqueda ya que los inmuebles que quedan disponibles son el remanente de lo que se alquiló a fines de 2012. “De tomas maneras siguen existiendo opciones y siempre hay alternativas de aquellos alquileres que terminan en estas semanas y se vuelven a ofrecer”, manifestó Tomas.
Antes de firmar el contrato se debe asesorar con un profesional para conocer cuáles son los puntos a tener en cuenta y qué no se debe aceptar. Luego, hay que tomarse el tiempo de revisar minuciosamente el inventario que ha hecho el propietario o la inmobiliaria para verificar que todo concuerde y hacer todas las correcciones necesarias, ya que al momento de entregar el departamento se requerirá que todo esté en las mismas condiciones en que se entregó o en las que figuran en el inventario y el contrato.
También, se debe tener en claro cuáles son los arreglos o gastos de mantenimiento que están a cargo del inquilino para que no haya, luego, discusiones o malos entendidos.
Alquileres y expensas
En promedio, un departamento de un dormitorio en la zona de las universidades del Litoral, Católica y Tecnológica está costando 1.600 o 1.700 pesos, más los impuestos y expensas. Se debe tener en cuenta, al momento de elegir una vivienda, el costo mensual que deberá abonarse en concepto de gastos comunes del edificio y tributos.
Esas sumas varían todos los meses pero, en promedio, para un edificio sin ascensor el gasto es de 180 a 280 pesos; y si se cuenta con ascensor el costo puede llegar a más de 400 pesos. De todas maneras, no sólo el ascensor es un factor que influye en el monto final, también lo es si se cuenta con limpieza o portero todo el tiempo, si las cerraduras son automáticas o si hay cámara de seguridad, entre otros.
“Los contratos son por 24 meses. Se pacta un monto total del alquiler y al inquilino se le da a pagar el primer año con un monto y el segundo con otro monto un poco superior”, indicó el presidente de la Cámara de Corredores Inmobiliarios.
Para seguir sumando
En cuanto a los gastos para el mantenimiento del hogar y la alimentación, los mismos dependerán de los hábitos de los jóvenes. De tomas maneras, si el año pasado se requerían 990 pesos para comer durante un mes, en 2013 debemos calcular no menos de 1.180 pesos.
Para los estudiantes de las universidades existen diferentes opciones como las cantinas o comedores universitarios que ofrecen menús variados y equilibrados a buenos precios. En el caso de la UNL, el comedor ofrece el almuerzo –entrada, plato principal, postre, pan y agua– a 10 o 15 pesos para los estudiantes (dependiendo de si se compra un solo tiquet o una chequera con cinco tiquets).
Otros gastos que suelen tener los estudiantes de institutos terciarios y universidades es el de apuntes. En promedio se calcula que deberán gastar 150 pesos por mes para fotocopias y otros materiales. Y en cuanto al transporte –para los que cursen en la ciudad universitaria o lejos de sus hogares– se debe calcular unos 78 pesos por mes con el boleto universitario, si se calculan dos viajes diarios (es decir, de ida y de vuelta) cinco días a la semana. También, se debe estimar que por lo menos una vez al mes esos jóvenes querrán regresar a visitar a sus familias, por lo que se puede estimar un gasto de 90 pesos en colectivos interurbanos.
Por último, se debe considerar que la experiencia universitaria implica mucho más que sólo estudiar. Si bien Santa Fe tiene una gran cantidad de propuestas recreativas gratuitas, hay que calcular que la entrada más económica al cine cuesta 35 pesos; que una entrada a un boliche está entre 30 y 40 pesos; y que un turno de fútbol 5 puede costar entre 12 y 18 pesos por persona, dependiendo de si es de día o de noche. Todas esas actividades, aunque optativas, constituyen un punto central para promover la relación entre los jóvenes.
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