La Justicia confirmó ayer la medida privativa de la libertad para Pablo César Vivas, acusado de matar con más de veinte puñaladas a Jesús Ramón Angulo. El hecho fue descubierto la madrugada del domingo, cuando un vecino encontró el cuerpo de la víctima en la vereda de su casa.
Un hombre de 30 años permanece detenido, acusado de matar a Jesús Ramón Angulo, un vecino de 55 años de la ciudad de San Jorge, hallado el último fin de semana degollado en la puerta de su casa y con una veintena de puñaladas. La Justicia dictó ayer la prisión preventiva para Pablo César Vivas, quien fuera aprendido el lunes en la casa de su padre, en la mencionada ciudad del departamento San Martín.
La audiencia en la que se le atribuyó el hecho tuvo lugar ayer por la tarde, en el subsuelo de tribunales de la capital provincial. Vivas, que estaba detenido desde el lunes en Sastre, fue trasladado hasta Santa Fe este miércoles a causa de la feria judicial.
El juez del trámite fue el Dr. Héctor Gabriel Candioti, quien en una misma audiencia y con la conformidad de la abogada defensora, Marcela Rinero, accedió al pedido de la fiscal de homicidios, Cristina Ferraro, que solicitó el tratamiento de la imputación y la prisión preventiva de manera conjunta.
Las pruebas
Por las pruebas recolectadas de manera preliminar, existen elementos suficientes como para acreditar la responsabilidad de Vivas en el truculento episodio. La descripción de un testigo que lo ubica en el lugar del hecho; el secuestro de una moto con presuntas manchas de sangre; y el hallazgo de armas blancas en el domicilio del imputado, fueron suficientes como para continuar con la detención mientras se tramita la investigación penal preparatoria.
El cuerpo sin vida de Angulo fue descubierto por un vecino, que rápidamente le avisó a una de sus hijas que vive en la esquina, sobre la misma cuadra de calle Catamarca al 2300, en una de las calles más transitadas del barrio San Martín. Hasta el lugar llegaron agentes de la comisaría 2da. de San Jorge y luego efectivos de Orden Público e Investigaciones provenientes de Sastre.
La autopsia reveló que Angulo recibió más de veinte puñaladas, distribuidas en la zona del tórax, cuello, abdomen y piernas; y un profundo corte transversal a la altura de la garganta.
Con alevosía
Para la fiscal Ferraro, la atribución delictiva se corresponde con la figura penal del “homicidio calificado por alevosía”, dada la enorme cantidad de heridas cortantes propinadas a la víctima.
Según los testigos Angulo “estaba en la vereda, sentado en una silla plástica contra la pared” cuando lo encontraron. Sin embargo, se cree que éste fue visitado por un conocido suyo cuando se encontraba cenando, ya que quedaban restos de comida sobre la mesa del comedor. Abona la idea de que fue atacado por alguien de su confianza el hecho de que la puerta haya estado abierta de par en par y que sólo le faltaran algunos pesos que solía llevar en el bolsillo del pantalón. Su celular y otros efectos personales quedaron en la casa.
A propósito del imputado, Jesica Angulo, la más chica de las hijas del occiso, reconoció que Vivas conocía a su padre y que no era raro verlos juntos en su casa o en el bar tomando cerveza.
No hay razón
Por el momento se ignoran los motivos que llevaron a Vivas a cometer semejante ataque para con su compañero. Se presume que el agresor le habría solicitado dinero para comprar bebida o drogas al dueño de casa y que una negativa habría generado la desavenencia. Pero todo se encuentra en el marco de las especulaciones ya que hasta ahora no hay testigos presenciales.
Este miércoles, una vez finalizada la audiencia, el acusado regresó a la Alcaidía de Sastre, en el departamento San Martín, donde quedará alojado preventivamente hasta que se ordene su pase a una dependencia del Servicio Penitenciario provincial.
Por su parte, el juez Candioti dará los fundamentos de su resolución por escrito en las próximas horas. Y a partir del lunes la investigación quedará a cargo del fiscal de San Jorge, Carlos Zoppegni, actualmente de licencia por la feria judicial de invierno.
Piden una dura condena
Jesica es la menor de cuatro hermanas, hijas de Jesús Angulo. Tiene 22 años y en estos días se convirtió en la vocera de la familia para informar los pormenores del caso, además de ser ella quien tuvo la desgracia de hallar el cuerpo de su padre.
Para las hermanas Angulo, “lo que nosotros pretendemos es que no vuelva a la calle”, dijo Jesica a El Litoral, en referencia al acusado de matar a su padre. “Queremos que tenga la mayor condena y que pague con los años que tenga que pagar”, agregó.
“Mi papá dejó cuatro hijas, yo soy la más chica y la mayor tiene 34 años y si esta persona sale, yo y mis hijos lo vamos a cruzar en la calle dentro de unos años y no queremos ver eso”, enfatizó la joven mujer.
Si bien no pudo ser confirmado oficialmente, a oídos de la familia Angulo llegaron versiones de que no sería ésta la primera vez que se lo vincula a Vivas con hechos graves. El acusado, que trabajaba como peón de albañil con su padre, habría estado detenido en Córdoba no hace mucho tiempo, reveló la entrevistada.
A propósito de la relación que mantenía con su padre, Jesica contó que “era habitual que mi papá estuviera afuera tomando, eran conocidos”, incluso “yo he estado presente cuando él llegaba a visitarlo”. “Esa tarde (sábado) estuvieron en un boliche y hablaron lo más bien, no tuvieron una discusión antes como se dijo”, explicó.
La audiencia en la que se le atribuyó el hecho tuvo lugar ayer por la tarde, en el subsuelo de tribunales de la capital provincial. Vivas, que estaba detenido desde el lunes en Sastre, fue trasladado hasta Santa Fe este miércoles a causa de la feria judicial.
El juez del trámite fue el Dr. Héctor Gabriel Candioti, quien en una misma audiencia y con la conformidad de la abogada defensora, Marcela Rinero, accedió al pedido de la fiscal de homicidios, Cristina Ferraro, que solicitó el tratamiento de la imputación y la prisión preventiva de manera conjunta.
Las pruebas
Por las pruebas recolectadas de manera preliminar, existen elementos suficientes como para acreditar la responsabilidad de Vivas en el truculento episodio. La descripción de un testigo que lo ubica en el lugar del hecho; el secuestro de una moto con presuntas manchas de sangre; y el hallazgo de armas blancas en el domicilio del imputado, fueron suficientes como para continuar con la detención mientras se tramita la investigación penal preparatoria.
El cuerpo sin vida de Angulo fue descubierto por un vecino, que rápidamente le avisó a una de sus hijas que vive en la esquina, sobre la misma cuadra de calle Catamarca al 2300, en una de las calles más transitadas del barrio San Martín. Hasta el lugar llegaron agentes de la comisaría 2da. de San Jorge y luego efectivos de Orden Público e Investigaciones provenientes de Sastre.
La autopsia reveló que Angulo recibió más de veinte puñaladas, distribuidas en la zona del tórax, cuello, abdomen y piernas; y un profundo corte transversal a la altura de la garganta.
Con alevosía
Para la fiscal Ferraro, la atribución delictiva se corresponde con la figura penal del “homicidio calificado por alevosía”, dada la enorme cantidad de heridas cortantes propinadas a la víctima.
Según los testigos Angulo “estaba en la vereda, sentado en una silla plástica contra la pared” cuando lo encontraron. Sin embargo, se cree que éste fue visitado por un conocido suyo cuando se encontraba cenando, ya que quedaban restos de comida sobre la mesa del comedor. Abona la idea de que fue atacado por alguien de su confianza el hecho de que la puerta haya estado abierta de par en par y que sólo le faltaran algunos pesos que solía llevar en el bolsillo del pantalón. Su celular y otros efectos personales quedaron en la casa.
A propósito del imputado, Jesica Angulo, la más chica de las hijas del occiso, reconoció que Vivas conocía a su padre y que no era raro verlos juntos en su casa o en el bar tomando cerveza.
No hay razón
Por el momento se ignoran los motivos que llevaron a Vivas a cometer semejante ataque para con su compañero. Se presume que el agresor le habría solicitado dinero para comprar bebida o drogas al dueño de casa y que una negativa habría generado la desavenencia. Pero todo se encuentra en el marco de las especulaciones ya que hasta ahora no hay testigos presenciales.
Este miércoles, una vez finalizada la audiencia, el acusado regresó a la Alcaidía de Sastre, en el departamento San Martín, donde quedará alojado preventivamente hasta que se ordene su pase a una dependencia del Servicio Penitenciario provincial.
Por su parte, el juez Candioti dará los fundamentos de su resolución por escrito en las próximas horas. Y a partir del lunes la investigación quedará a cargo del fiscal de San Jorge, Carlos Zoppegni, actualmente de licencia por la feria judicial de invierno.
Piden una dura condena
Jesica es la menor de cuatro hermanas, hijas de Jesús Angulo. Tiene 22 años y en estos días se convirtió en la vocera de la familia para informar los pormenores del caso, además de ser ella quien tuvo la desgracia de hallar el cuerpo de su padre.
Para las hermanas Angulo, “lo que nosotros pretendemos es que no vuelva a la calle”, dijo Jesica a El Litoral, en referencia al acusado de matar a su padre. “Queremos que tenga la mayor condena y que pague con los años que tenga que pagar”, agregó.
“Mi papá dejó cuatro hijas, yo soy la más chica y la mayor tiene 34 años y si esta persona sale, yo y mis hijos lo vamos a cruzar en la calle dentro de unos años y no queremos ver eso”, enfatizó la joven mujer.
Si bien no pudo ser confirmado oficialmente, a oídos de la familia Angulo llegaron versiones de que no sería ésta la primera vez que se lo vincula a Vivas con hechos graves. El acusado, que trabajaba como peón de albañil con su padre, habría estado detenido en Córdoba no hace mucho tiempo, reveló la entrevistada.
A propósito de la relación que mantenía con su padre, Jesica contó que “era habitual que mi papá estuviera afuera tomando, eran conocidos”, incluso “yo he estado presente cuando él llegaba a visitarlo”. “Esa tarde (sábado) estuvieron en un boliche y hablaron lo más bien, no tuvieron una discusión antes como se dijo”, explicó.
EL LITORAL.
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