Los delincuentes abrieron un boquete en "Echesortu Sport", de Mendoza al 3900, desactivaron la alarma, violentaron una caja fuerte para retirar el dinero y, además, se llevaron 120 mil pesos en mercadería.
.La Capital |
Una conocida tienda de indumentaria deportiva de barrio Echesortu sufrió esta madrugada la visita de delincuentes que actuaron no sólo con audacia sino también con profesionalismo. Primero abrieron un boquete en la pared, después desactivaron el sistema de alarma y trabajaron con total tranquilidad hasta que violentaron una caja fuerte. Pero antes de irse con más de quince mil pesos en efectivo, se hicieron tiempo para recolectar mercadería por un valor cercano a los 120 mil pesos.
Para colmo, el dueño del negocio afirmó a La Capital que en la seccional 6ª no le quisieron tomar la denuncia "porque había llegado justo en el horario de cambio de guardia".
El robo se produjo alrededor de las cinco de hoy en "Echesortu Sport", local ubicado en Mendoza 3960, frente a la Escuela Pestalozzi. Hace dos años, ese negocio fue blanco de una impresionante seguidilla de atracos, el más resonante ocurrió cuando una banda huyó con una camioneta cargada de ropa deportiva.
En este último caso, los asaltantes ingresaron al negocio luego de abrir un boquete en la pared. Después demostraron que eran profesionalismo y que contaban con información porque desactivaron el sistema de alarma.
Luego, con un margen un poco más holgado, trabajaron pacientemente para violentar la tapa de la caja fuerte que está empotrada en la pared de la oficina administrativa. De allí, según contó a este diario Juan Carlos Vignatti, dueño del negocio, se llevaron más de 15 mil pesos. Pero eso no fue todo. Los ladrones se hicieron tiempo para recolectar mercadería del salón de ventas y del depósito.
"Se llevaron unos 120 mil pesos en mercadería, principalmente calzado de primeras marcas y de los más caros. Se nota que vinieron preparados porque no dejaron ni las cajas", dijo el comerciante. Vignatti sostuvo que la alarma se apagó minutos después de las 5 y que desde la central intentaron comunicarse con el 911, pero no obtuvieron éxito.
El empresario sostuvo que, además de soportar el trago amargo que significó el robo, cuando su hijo fue a radicar la denuncia en la comisaría 6ª "le dijeron que vuelva más tarde porque estaban en pleno cambio de guardia".
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