El proyecto de instalación de un
mercado popular con precios de frutas, verduras y productos de primera
necesidad "acomodados" y por debajo de la cadena comercial de
distribución detonó sus primeras repercusiones.
La Capital |
El proyecto de instalación de un mercado popular con precios de
frutas, verduras y productos de primera necesidad "acomodados" y por
debajo de la cadena comercial de distribución detonó sus primeras
repercusiones. La propuesta lanzada por la Federación de Tierra y
Vivienda (FTV) fue calificada por el presidente del Centro Unión
Almaceneros, Juan Milito, como "de muy difícil implementación, casi
impracticable", aunque aclaró que la llegada de productos a bajos
valores en forma esporádica "sirve como un buen marcador de precios". El
titular del Programa municipal de Agricultura Urbana, Antonio Lattuca,
le dio la bienvenida a la idea, pero advirtió que "si no se planifica
con los productores a mediano plazo, no podrá sostenerse en el tiempo".
Según prometió el líder local de la
FTV, Juan Carlos Rodríguez, la ciudad podría consagrarse como la primera
en tener un mercado central del interior con precios acomodados. La
pretensión es bajar a Rosario el programa "Para todos".
La iniciativa busca salirle al cruce a
la inflación y ofrecer productos alimenticios a menor valor que la
cadena de comercialización de almacenes y supermercados. El objetivo de
este primer eslabón es ponerlo a disposición del consumidor antes de fin
de año.
Lo singular es que ahora la
organización kirchnerista busca instalar un mercado popular con carácter
permanente. Para eso, la agrupación busca reconvertir uno de sus
galpones en mercado.
Escollos. "Si la
llegada de mercadería los martes y jueves les resulta dificultosa, creo
que hacerlo a diario es casi impracticable. Sí creemos en que estos
programas funcionan como indicador de precios", consideró Milito.
El líder de los almaceneros cuestionó
la falta de previsión del lanzamiento con las fuentes laborales que
genera la actividad en Rosario. "Sería malo, porque de esto trabajan
miles y miles de conciudadanos", advirtió Milito, al considerar que la
mayoría de los productos se canalizan por los mercados de Concentración
de Fisherton y de Productores. "No veo que haya otra logística para
abastecer un mercado así", agregó.
Lattuca aclaró que la pretensión de la
FTV no afectaría a Agricultura Urbana "porque los huerteros le venden
directamente al público".
También consideró al proyecto como
"positivo si comercializan lo que compran a los productores, a los
cuales les queda poco margen en la cadena de intermediación". Y agregó:
"El tema es si logran buen precio para ambos y si la planificación se
sostiene en el tiempo y no resulta algo esporádico".
"Siempre estuvimos en defensa de las
economías regionales y el cumplimiento de la normativa provincial y
municipal en materia de radicación de comercios y el control sanitario
de los alimentos", puntualizó la asesora legal de la Cámara de
Supermercadistas de Rosario, Verónica Solmi.
Al respecto, afirmó: "Adherimos al
fomento de productos regionales y buscamos preservar la salud de la
población en la seguridad alimentaria, tanto en la cuestión
bromatológica como la cadena de frío".
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