Darío Iguini, quien se desempeñó como casero de la conductora, recurriría a la Justicia por no haber llegado a un acuerdo salarial, según informó el diario El País.
Susana Giménez tiene problemas legales con Darío Iguini, un empleado uruguayo que trabajó para ella durante 12 años. Era encargado de La Mary, la mansión de la diva ubicada en Punta del Este, y fue despedido tras no llegar a un acuerdo cuando le reclamó a la conductora que le actualizara su sueldo "en base a los aumentos con retroactividad", según informó el diario uruguayo El País.
El casero contó que cobraba 2 mil dólares mensuales y se enteró de que le correspondía cobrar pagos retroactivos, según la legislación vigente de su país. En un principio, habían llegado a un acuerdo por 17 mil dólares. Sin embargo, a la hora de firmar el aumento, Susana solo le quería pagar 12 mil dólares. Como no llegaron a un entendimiento, Iguini fue despedido y está esperando lograr un "acuerdo extrajudicial" para cobrar una indemnización.
"Ella me quería hacer renunciar a mis derechos laborales. Me ofreció 17 mil dólares y al momento de pagarme me quería dar 12 mil. Yo no quise firmar y me cesó. Tengo la carta del despido en mis manos", señaló en encargado en una conversación telefónica con la publicación de Uruguay. En caso de no encontrar una solución, le iniciaría una demanda por 80 mil dólares.
Darío afirmó que la conductora le debe "los aumentos del diez por ciento anual de los últimos seis años". Además reveló que llegó a trabajar entre 12 y 16 horas diarias, cuando lo legal son solo 8 horas. El casero, cuya hija es ahijada de Susana, estaba a cargo de las casas en Punta del Este y en Barrio Parque. Trabajó cuatro años en la Argentina y ocho en Uruguay
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