El defensor del sindicado represor José Rubén Lofiego dijo que el ex policía cumplió órdenes del Ejército y que "no podía hacer nada para evitar las detenciones", ya que "incluso él mismo era pasible de ser privado de su libertad" en caso de no cumplirlas.
El defensor del sindicado represor José Rubén Lofiego dijo que el ex policía cumplió órdenes del Ejército y que "no podía hacer nada para evitar las detenciones", ya que "incluso él mismo era pasible de ser privado de su libertad" en caso de no cumplirlas.
El abogado de Lofiego continuó con su alegato en el marco del juicio oral que se le sigue, junto a otros cinco imputados, por crímenes de lesa humanidad cometidos en el Servicio de Informaciones (SI) de la ex Jefatura de policía de Rosario.
El letrado aludió a la prescripción de los delitos que se le imputan. También adujo que el marco normativo dictado por el gobierno de Isabel Perón destinado a la "lucha contra la subversión" no dio otra posibilidad a la policía que detener a las personas sindicadas como tales en cumplimiento de órdenes de sus superiores. "Mi defendido no podía hacer nada ni en lo formal ni en lo material para evitar las detenciones, incluso él mismo era pasible de ser privado de su libertad en caso de no cumplir órdenes", dijo.
Además, indicó que la responsabilidad en las "detenciones" fue del Ejército y que Lofiego no podía determinar la ilegalidad o legalidad de dichas privaciones de la libertad.
Para las querellas, Lofiego "es uno de los más emblemáticos integrantes del grupo represivo que operara en el SI; su ferocidad y especial crueldad en los procedimientos de secuestro e interrogatorios lo trasciende". Las audiencias continuarán el lunes donde se espera que finalice el alegato de Lofiego y continúe el de Ricardo Chomicki y Ramón Díaz Bessone.
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