"DURO, DIFÍCIL Y COMPLICADO"

Así definió Frank Kudelka el triunfazo que cosechó Unión ante el Fortín. Y destacó: “Dentro de una victoria inmerecida, hubo buenas individualidades y mucho coraje”.

Las tres palabras que eligió Frank Kudelka para graficar la gran victoria que cosechó anoche Unión ante Vélez, el último campeón, reflejan claramente lo que significa este resultado. “Fue duro, difícil y complicado”, dijo el DT rojiblanco dejando en evidencia la importancia de los tres puntos cosechados. “Fue duro, difícil y complicado. Pero tuvimos algunos atributos de un partido en construcción. Teníamos al frente un equipo seriamente difícil en el fútbol argentino”, empezó diciendo el entrenador una vez consumada la victoria. La recuperación del Tate, tras la caída ante La Crema, sirve, según el DT para escalar en la tabla -además de salir del descenso y la Promoción- y para mantener en alto el espíritu. “El triunfo catapulta en puntos, sostiene la mentalidad buena. Pero tenemos que mantener los pies sobre la tierra porque hay que mejorar”, manifestó Kudelka, sin dejar de lado la necesidad de mejorar en algunos aspectos. Después, el entrenador del Tate hizo hincapié en la buena producción de su elenco jugando fuera de casa, donde se quedó con los dos triunfos que suma en este certamen. “De tres equipos complicados de visitantes sacamos dos triunfos”, indicó en relación a los partidos que le ganaron a Colón y el Fortín (en el restante cayeron con Boca). A la hora de destacar algunos puntos, Kudelka manifestó que “dentro de una victoria inmerecida, vamos a ser honestos, hubo algunas individualidades buenas y mucho coraje”. Claro que acompañados por los más de 2500 hinchas que llegaron hasta el José Amalfitani. Y de ello no se olvidó el DT. “La gente alienta. Sabe que va a ser duro. Estoy orgulloso de ser técnico de Unión”, dijo en referencia al continuo apoyo que recibe su conjunto. Algo que intentó dejar en claro Kudelka fue su visión y lectura sobre la permanencia. A pesar de haber abandonado el fondo de la tabla de promedios, el DT fue cauto y sabe que lo de ayer fue sólo una batalla en la extensa lucha. “A mí no me molesta, pero yo no vivo pensando en las tablas. Lo que pienso es lo siguiente: estamos en una institución que ascendió recientemente y la soga al cuello la vamos a tener siempre. Si no estamos en conocimiento de eso, un día estamos sonriendo y un día al borde de la cornisa”. Cuando tuvo que analizar el juego de sus dirigidos, el entrenador rojiblanco indicó: “Tuvimos durante algunos pasajes poca tenencia de la pelota. Y eso, ante un rival con mucha técnica, te complica porque te acata masivamente. Además, adolecemos de eficacia para marcar. Al principio tuvimos dos o tres y eso hubiese cambiado. Pero insisto, no teníamos a cualquier rival al frente”. Un párrafo aparte mereció la adición del árbitro, que sumó ocho minutos al tiempo reglamentario. “Le decía a Diego (Abal) que no mando a hacer tiempo. Pero él consideró que ocho minutos estaban bien”, contó. Exceso o no del juez, Unión lo aguantó y festejó ante el campeón.