anuncio

anuncio

anuncio

anuncio

domingo, 24 de enero de 2016

Las novelas y los libros de política derrocaron a los de autoayuda

Los intereses de los lectores santafesinos mutaron este verano. Los adolescentes son los principales consumidores.
La mayoría de los compradores opta por pasar un largo rato en la librería para elegir bien. Foto: J. Busiemi
Una pileta o un patio fresco invitan a disfrutar de un buen libro y olvidarse de las altas temperaturas. Todos los años las librerías ven un repunte de ventas en esta época del año, y en esta oportunidad el pico comenzó en Navidad. Los lectores se dividen entre quienes quieren desenchufarse de la realidad y buscan novelas románticas o policiales; y los que quieren saber más del trasfondo en el marco del cambio de gobierno y optan por los libros sobre política, en general, escritos por periodistas porteños.

Esos rubros desplazaron a los que se habían convertido en el clásico del principio de año: los libros de autoayuda. Además, en las librerías destacaron que los adolescentes se han convertido en los grandes lectores y que llegan ávidos de las nuevas sagas, aunque las que ya tienen varios años, como “Harry Potter”, también tuvieron un repunte.

Como contrapartida los autores clásicos han quedado relegados y solo son buscados cuando los piden en las escuelas o por algún abuelo o padre que quiere compartirlos con las nuevas generaciones.

En las librerías reconocen que las ventas han sido buenas y que comenzaron a moverse desde Navidad. Aunque el intenso calor de los últimos días ha generado que no sean muchos los que se animen a salir de compras.

“Este año la gente no se ha volcado tanto, como otros años, al libro de autoayuda. Ahora prefieren las novelas, tanto los hombres como las mujeres. Las históricas románticas y las policiales son las más buscadas. Buscan libros para distenderse y pasarla bien”, explicó Mirta de Alicia Libros.

En tanto, Camila de Mauro Yardin coincidió con la gran demanda de novelas y agregó que los libros sobre política también son muy buscados. “Un libro que se vendió mucho es «La sonrisa de Mandela» de John Carlin porque el presidente Mauricio Macri lo recomendó. Se agotaron dos o tres ediciones enseguida”, señaló. Además, “El Final” de Luis Majul, “La Crítica de la Razón Populista” de Miguel Wiñazki, “Es el Peronismo, Estúpido” de Fernando Iglesias y “Secreto de Estado” de Nelson Castro son los títulos políticos más vendidos.

Una experiencia

Comprar un libro es una experiencia larga. Primero aparece la decisión de incorporar un ejemplar más a la biblioteca personal, se llega hasta la librería y en la mayoría de los casos se opta por recorrer las estanterías y mesas viendo las novedades, incluso si ya se había decidido qué se quería adquirir.

“Los que vienen decididos son los que buscan los libros de política y de actualidad, pero la gente que busca las novelas de verano prefiere mirar, ver qué llegó y a veces piden recomendaciones”, contó Camila.

Las novelas se consiguen entre 150 y 400 pesos y los de política rondan los 300 pesos. “Hay gente que lleva dos o tres. Cada uno lo va manejando de acuerdo a su bolsillo pero en general se llevan como mínimo dos”, indicó Mirta.

En ese sentido, marcaron que la diferencia entre optar por la edición económica (pocket) y la tradicional no es tanto por el dinero como por la comodidad. Las primeras son elegidas por su tamaño reducido que las hace más fácil de llevar en el bolso y las segundas por el tamaño de la tipografía que permite una lectura más cómoda.

Nuevos lectores

Un tema que sorprende gratamente a quienes trabajan en el rubro es la gran cantidad de adolescentes lectores que hay en la actualidad. Tras el fenómeno de “Harry Potter” –que sigue vigente y tuvo un repunte este verano– los ahora adolescentes no dejan de consumir libros, en especial sagas; y si tienen película, mejor.

“Los Juegos del Hambre” y “Divergente” son solo algunos de los ejemplos de novelas que recientemente han estrenado su versión cinematográfica. Lo mismo ocurrió antes con “Percy Jackson” y “Bajo la Misma Estrella”. Se ha dado una retroalimentación entre el cine y la literatura que sorprende a los libreros.

“Hay muchísimos preadolescentes y adolescentes lectores. Es impresionante la cantidad de libros que hay para esa edad. Sobre todo porque tienen un empuje especial desde el cine, la mayoría de las películas nuevas están basadas en libros y eso los incentiva a comprar el libro y ver qué va a pasar”, señaló Camila.

Y Mirta agregó entusiasmada: “Los adolescentes leen un montón. Desde que salió «Bajo la Misma Estrella» siguieron con los libros de Rick Riordan sobre mitología. Los chicos, gracias a Dios, están a full”.

Esa mayor demanda por parte de los adolescentes se evidencia en la manera en la que los libros pensados para esa franja etaria han ganado espacio dentro de las librerías. Cada vez son más las estanterías y mesas que se ocupan con diferentes propuestas para ese público.

Lo mismo ocurre con los libros para los pequeños. Desde publicaciones en cartón y en plástico con dibujos coloridos –y en algunos casos complementos musicales o sonoros– para los más chicos, pasando por historietas de todo tipo hasta llegar a las novelas, las propuestas se multiplican y se vuelven una opción demandada por los padres que quieren promover el hábito de la lectura y los chicos que disfrutan poder sumergirse en ese mundo y comprar lo que más los atrae.

Victoria Rodríguez / Diario UNO

No hay comentarios:

Publicar un comentario