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sábado, 30 de enero de 2016

MISTERIO EN SAN LUIS Asesinaron a balazos a la esposa de un intendente

Se trata de la pareja del jefe municipal de La Calera, Diego Lorenzetti. La víctima recibió dos disparos cuando salía de su casa. Los agresores no la asaltaron. "Me mandaron a matar a mi mujer ¿Cómo le explico a mis hijos", dijo el viudo.
Infobae | 
Asesinaron a balazos a la esposa de un intendente

 La víctima fue identificada como Romina Aguilar y era la esposa del intendente de la localidad puntana de La Calera. De acuerdo con las primeras informaciones, la mujer fue atacada momentos después de que salió de su casa en la capital provincial.
 
Al parecer, la asesinaron de dos tiros mientras cerraba el portón de la vivienda y luego de sacar su camioneta Renault Duster para viajar con destino a la escuela de La Calera donde era alumna del Plan PIE (Plan de Inclusión Educativa). Los vecinos escucharon los disparos y dieron aviso a la policía. El intendente estaba dentro de la casa al momento del hecho.
 
Medios locales sostienen que los atacantes no la asaltaron e incluso arrastraron el cuerpo varios metros, lo que desterraría por completo la hipótesis de que se trató de un robo. Sin embargo, aún no hay confirmación oficial y no se descarta nada. Aseguraron, también, que fueron dos los asesinos y que huyeron del lugar en una moto.
 
La policía aún trabaja en el lugar y en la causa intervino la jueza Virgina Palacios. En diálogo con el portal San Luis Informa, el propio intendente Diego Lorenzetti confirmó que se trató de un crimen por encargo. "Me mandaron a matar a mi mujer ¿Cómo le explico a mis hijos?", lamentó el jefe municipal. La mujer fue asesinada en el barrio Faecap, ubicado en las inmediaciones de la ruta 147, que lleva justamente desde la capital de la provincia a La Calera.
 
Oriundo de Santa Fe, Lorenzetti se radicó en esa localidad hace unos diez años cuando vino a trabajar para una importante empresa cementera del lugar. A partir de su crecimiento económico, abrió su propio negocio hasta que tomó la decisión de incursionar en política. Debido a su popularidad en la pequeña localidad puntana, llegó a la intendencia bajo el ala del partido de los hermanos Adolfo y Alberto Rodriguez Saá. La pareja tenía un hijo, que al momento del crimen estaba en La Calera.

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