viernes, 26 de diciembre de 2014

PROVINCIA DE SANTA FE Cayó un femicida en Sunchales

Fue el miércoles, a las 8, en esa ciudad. Un hombre de 44 años asesinó a su expareja, Ángela Piri, de 32 años, de varias puñaladas en la vía pública.
Diario UNO | 
Cayó un femicida en Sunchales
El miércoles, a las 8.30, una partida de agentes del tercio de guardia de la comisaría 3ª de Sunchales, UR V departamento Castellanos de la policía santafesina, aprehendieron preventivamente a E.A.R., de 44 años, luego de haber asesinado a puñaladas a su expareja en calle Maretto, entre Azurduy y Leloir de la ciudad de Sunchales, y secuestraron un arma blanca con la que cometió el aberrante asesinato.
La locura asesina se desató a las 8, cuando Ángela Piri conducía su moto; su expareja le salió al cruce para dialogar, pero según los testigos del caso, la lacónica conversación se transformó en una tragedia cuando el hombre sacó un cuchillo de su cintura y la apuñaló reiteradamente. Ella cayó muerta; luego el médico constató que murió en el acto.
La denuncia del vecindario
Los gritos desgarradores de la mujer se hicieron sentir en las adyacencias de la calle Maretto, entre Azurduy y Leloir de la ciudad de Sunchales. Vecinos, comerciantes y ocasionales peatones se convirtieron de un momento para el otro en testigos de un cruento homicidio que fue el peor de los epílogos para una pareja separada que jamás volverá a ser lo que fueron.
Ellos denunciaron el suceso a los policías de la comisaría 3ª de Sunchales. Los vigilantes llegaron minutos después, detuvieron al agresor y secuestraron el cuchillo con el que se cometió el cruento femicidio que tuvo como víctima a Ángela Piri.
Cruento ataque criminal
Ella, Ángela Patricia Piri, de 32 años, conducía su moto y su expareja le salió al cruce. Aparentemente y según los testigos, la mujer detuvo la marcha del vehículo y se apoyó en uno de sus pies e iniciaron un diálogo entre ambos cuando se desencadenó la irrefrenable locura asesina y E.A.R., de 44, llevó su mano a la cintura, sacó un cuchillo y la aplicó incontables puñaladas en el cuerpo. La víctima cayó en la calle y quedó inmóvil.
Después, los vigilantes encintaron la zona; luego arribó el médico de la repartición policial, que constató el fallecimiento y presentaba cortes en la mano izquierda, dos profundas puñaladas en el tórax del lado izquierdo y otras dos en la zona abdominal. 

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