Para muchos de los 800 chicos que ayer llenaron la platea del Teatro El Círculo fue la primera vez. La primera vez en un teatro y la primera vez que vieron y escucharon en vivo a una orquesta sinfónica.
La Capital |
Para muchos de los 800 chicos que ayer llenaron la platea del Teatro El Círculo fue la primera vez. La primera vez en un teatro y la primera vez que vieron y escucharon en vivo a una orquesta sinfónica. Algunos descubrieron el sonido del arpa y para otros la novedad fue el violín. Como haya sido la experiencia de cada uno, todos se mantuvieron concentrados y aplaudieron, y mucho, cuando la Orquesta Sinfónica Provincial de Rosario, dirigida por el maestro David Del Pino Klinge, cerró el Ciclo de Conciertos Didácticos tocando Malambo, la danza final de la obra Danzas de Estancia del compositor argentino Alberto Ginastera. "Fue fantástica la actitud de los chicos", dijo el director peruano, que según sus propias palabras lleva "toda una vida haciendo pedagogía", y que fue invitado especialmente para estar al frente de los 15 conciertos que cerraron ayer con la presencia de 12 mil alumnos.
Tras casi una década sin llevarse adelante, el Ciclo de Conciertos Didácticos de la Orquesta Sinfónica de Rosario se puso en marcha nuevamente en 2012 y ya había reunido a más de 8 mil alumnos. Este año, la experiencia cerró con más 12 mil chicos en 15 conciertos que recorrieron los diferentes movimientos musicales, desde el barroco con Bach y el clásico con Mozart, pasando por Beethoven y en el romántico, Ravel en el impresionismo, Stravinsky en el contemporáneo y Ginastera fue el elegido para cerrar como compositor latinoamericano. Todos ellos con un plus: la proyección paralela de obras correspondientes a cada período.
Sin embargo, no se trata sólo del número. "Este año tuvimos 800 chicos por función y ese es el máximo para trabajar, porque hay que dar calidad y es un concierto donde chicos tienen que escuchar y ver. Y porque cuando les ves las caras al entrar al teatro te das cuenta que para el 90 por ciento es la primera vez que lo hace y hay que ofrecerles un lugar de privilegio", dijo Verónica Saracho, violista de la orquesta, coordinadora del ciclo y docente en escuelas medias.
Voces. Los que aplaudieron fervorosamente desde la platea eran chicos que acompañados por sus docentes llegaron no sólo de escuelas de Rosario, sino también de localidades cercanas como Las Rosas, Fray Luis Beltrán, Arroyo Seco, Timbúes y Empalme Villa Constitución.
"Música clásica habíamos escuchado en clase y nos gustó mucho, pero así en directo es la primera vez", dijo Mariano, alumno de primer año de la Escuela Nº 513 (Perón al 5400), que junto a sus compañeros enumeró uno a uno los instrumentos que conocían y que ayer escucharon sonar en vivo.
"Tocaron la flauta, la flauta traversa, los timbales, el violín y el trombón", dijeron a coro, pero todos coincidieron en que la novedad era el arpa.
Para las chicas, como Luján, "el instrumento más lindo fue el arpa"; y entre los compositores clásicos del recorrido musical, Beethoven y Tchaikovsky fueron los que más le gustaron a Sandy.
Las chiquitas de 5º y 6º grado de la Escuela Dante Alighieri de Las Rosas también apuntaron al arpa como "el más lindo" y el que ninguna había visto antes.
"Yo conocía el violín porque iba a clases", se escuchó decir a una, mientras que la docente, María Laura, apuntaba que "para chicos de localidades pequeñas que no tienen posibilidad de ver este tipo de espectáculos, esta es una oportunidad única".
Lo mismo para los estudiantes de 7º grado de la Escuela Nº 1.014 de Fray Luis Beltrán. "Los traemos cada vez que se hace porque un espectáculo de estas características es algo muy alejado de la realidad de estos chicos, pero es una experiencia única que ellos aprovechan durante el concierto y también después", dijo la profesora de música Carina Ocampo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario