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sábado, 25 de agosto de 2012

SANTA FE: “Siempre hay casos extremos, pero la reinserción es posible”

El presidente de La Casita de Juan Diego, Raúl Caselli, se refirió al robo y abuso a una mujer de 84 años. Advirtió la necesidad de trabajar sobre los chicos en situación de calle para prevenir delitos.

 

El presidente de La Casita de Juan Diego, Raúl Caselli, se refirió al robo y abuso a una mujer de 84 años
El presidente de La Casita de Juan Diego, Raúl Caselli, se refirió al robo y abuso a una mujer de 84 años
El caso de un chico de 15 años que ingresó en una vivienda de Crespo al 2.400 para robar y que, además, golpeó y abusó de una mujer de 84 años, volvió a sacudir a la sociedad santafesina. Un antecedente similar –asalto seguido de abuso, aunque no involucraba a un menor de edad– se había vivido en la Peatonal el 11 de abril pasado. Ante hechos tan difíciles de asumir para una sociedad la pregunta que siempre surge es si existe la posibilidad de que las personas que llevan adelante estas prácticas tienen posibilidad de reinsertarse.


La asociación La Casita de Juan Diego trabaja con chicos en situación de calle y su presidente, Raúl Caselli, le dijo a Diario UNO: “La reinserción no es fácil para los chicos que nacieron en la calle. Para salir de la casa y estar en situación de calle hay tres motivos fundamentales: Nunca tuvieron familias; tuvieron familias y sufrieron agresiones físicas muy fuertes; o que hayan tenido problemas de violaciones cuando eran chicos. En el primer y el tercer caso es muy difícil la reinserción”.


“Es sumamente difícil –continuó– para una persona que vivió o que vive una situación de calle poder salir de eso. Lo que vemos en la Casita de Juan Diego es que en los chicos hay una cuestión genética que influye mucho. Nosotros logramos que aquella Barra del Poxi desapareciera en un gran porcentaje. Eliminar el problema totalmente va a ser muy difícil, porque en situaciones de frío extremo un chico que vive en la calle tiene que drogarse para subsistir y vivir en una situación de pandilla para poder sostener su vida y alimentarse”.


En este punto, Caselli remarcó que desde hace un año y medio la institución trabaja cinco casos de drogadicción extrema y que en la ciudad no hay una institución que pueda ayudar a los chicos a salir del circuito de la droga. “Le ofrecimos al Estado que trabajen en nuestra casa, que formen el equipo de profesionales adecuado porque hoy no hay institución que pueda trabajar con chicos que quieren dejar las drogas”, aseveró.


“En Santa Fe logramos reducir esas situaciones en el centro. Lógicamente que va a haber casos aislados que van a servir para que alguien, que no esté comprometido con la causa del amor, de la reinserción de estos chicos, diga: «Es imposible». Nosotros decimos que es posible”, aseguró.


En ese sentido, Caselli dijo: “Este año logramos que entre nueve y 11 chicos volvieran a su barrio. Pero para que eso suceda no los podemos dejar en una situación de promiscuidad extrema. Por eso les hacemos una piecita. Así conseguimos que cerca de 10 chicos vuelvan del centro a sus barrios. Es posible, pero muy difícil”.


“El Estado es quien en democracia organiza los fondos públicos para solucionar estos problemas. Ellos deben buscar la solución de fondo que seguro tardará mucho tiempo. Por eso el caso de la pobreza y la miseria extrema en los chicos en situación de calle amerita y exige que tomemos resoluciones rápidas y pronto”, dijo.


Caselli sostiene que hay varias instituciones que están trabajando en este problema. “Queremos que nos ayuden. Las instituciones no vamos a solucionar el problema de fondo pero podemos ayudar. Mientras tanto va a haber casos extremos. Pero eso sucede hasta en la situación más perfecta donde hay casos de gente que tiene profundos problemas sociales. En Estados Unidos eso se vive a diario. Por eso el problema no es el caso general, sino actuar caso por caso para ir solucionándolo”, expresó.


“Juan Diego –explicó– atiende a los chicos que salieron de los barrios y llegaron al centro. Lo que hay que hacer es ir a los barrios. Santa Fe tiene que asumir su pobreza y tiene que mirarla y empezar a solucionarla. Porque como decía el Padre Rosso: «La pobreza, en Santa Fe, nos está pasando por arriba». Necesitamos que la sociedad tome conciencia”.


En referencia al ataque sufrido por la mujer de 84 años, Caselli dijo: “Por supuesto que este hecho es aberrante, que no tiene sentido y nadie plantea, que quede claro, que el hecho delictivo tiene que quedar impune. Nosotros planteamos que la sociedad tiene que tener premios y castigos. La sociedad tiene que educar y que el que no sabe respetar las normas hay que extraerlos para reeducarlos y para volverlos a ella”.


“Pero acá el tema grave es que no estamos trabajando sobre estos chicos, mientras la pobreza avanza, mientras los chicos pierden su contención familiar. No hay educación, no hay cultura del trabajo ni de la familia y la sociedad se mantiene al margen. Esto es lo que las sociedades tienen que ver. Hoy hay un caso que es extremo que no lo podemos dejar pasar. Pero hay un caso que se puede repetir, y que se va a repetir, si no actuamos”, advirtió.

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