lunes, 14 de septiembre de 2015

Santa Fe Comenzó el juicio al ex jefe de Polícia: Tognoli escuchará a acusación y luego a dos testigos

A las 9 comenzó la primera audiencia del juicio oral y público en el fuero federal, al que llega acusado de haber protegido a dos narcotraficantes y de haber amenazado a Norma Castaño, que lo denunció ante la Justicia santafesina cuando ya estaba a cargo de las fuerzas públicas de seguridad.
Manuel Testi/ UNO Santa Fe
Al exjefe de la Policía de la provincia Hugo Tognoli hoy le tocó madrugar. A a las 9, arrancó la primera audiencia del juicio oral y público en el fuero federal, al que llega acusado de haber protegido a dos narcotraficantes, mientras era jefe de la ex-Drogas Peligrosas, y de haber amenazado a una mujer, Norma Castaño, que lo denunció ante la Justicia santafesina cuando ya estaba a cargo de las fuerzas públicas de seguridad.

Al comenzar se realizó una lectura de un resumen que armó la fiscalía, a cargo de Martín Suárez Faisal, con las acusaciones a cada uno de los imputados. Esto permitirá que se evite leer las requisitorias de elevación a juicio que armó el fiscal de instrucción, Walter Rodríguez, que por su desarrollo y extensión llevarían varias jornadas.

Luego de esas lecturas, los jueces harán lugar para que los imputados puedan declarar. Baella adelantó que tenía ganas de hablar en la primera jornada, y luego de un cuarto intermedio, en horas del mediodía, la audiencia se reanudará a las 14, con la declaración de dos policías que participaron del operativo de detención de Torres. En total, hay 67 testigos convocados, uno de ellos prestará declaración de manera encubierta. En estos casos, la mecánica establecida será de una videoconferencia, en la que la imagen y la voz del testigo serán distorsionadas.
Manuel Testi/ UNO Santa Fe
Los imputados y la causa

Junto a Hugo Tognoli estará el exsubjefe de Inteligencia de Drogas Peligrosas, José Luis Baella. La investigación de instrucción demostró que juntos protegían a narcos de una manera muy paradójica: les armaban una causa penal para tener control de qué información ingresaba a la fuerza de seguridad sobre sus actividades. Con el tiempo, todos esos expedientes judiciales eran archivados. El fiscal de instrucción, Walter Rodríguez, agregó como agravante que esa protección tenía un costo: el delito se cometía con fines de lucro.

Entre los acusados hay un tercer policía, Mauricio Otaduy, que está acusado de haber filmado el video en el que se ve a Norma Castaño, la mujer que denunció a Tognoli por connivencia con narcotraficantes, hablando con Daniel El Tuerto Mendoza, luego detenido por tener una cocina de cocaína en su casa de Colastiné Norte. Ese video fue utilizado para amenazar a la mujer y obligarla a que retirara las acusaciones contra Tognoli. La defensa de Otaduy, sin embargo, plantea que el expolicía no sabía que el video iba a tener fines extorsivos y que filmar o hacer seguimientos era parte de su rutina de trabajo.

Los otros dos imputados son el Tuerto Mendoza y Fernando Torres, ambos detenidos desde julio del 2012. El primero que cayó fue Torres. Lo apresaron el 11 de julio de ese año, en la estación de ómnibus, a donde llegó con un paquete de dos kilos de cocaína. Los investigadores creen que esa droga salió de la cocina que Mendoza tenía en su casa ubicada en el kilómetro 2 de la ruta Nº 1, al final del bulevar Los Jazmines y la última calle denominada Las Encinas, en Colastiné Norte. Entonces, al día siguiente que cayó Torres allanaron esa propiedad y encontraron 10 kilos de cocaína, seis botellas de precursores químicos, tales como ácido clorhídrico y acetonas; una prensa regulable para armar los ladrillos de droga, una estufa para secado, un revólver calibre 32 cargado, un GPS y teléfonos celulares.

Ese día, Mendoza quedó detenido y al poco tiempo, su familia puso en alquiler la casa. Se mudó Raúl Beto Basimiani, conocido como El Rey de la Cumbia, hoy también detenido acusado de narcotráfico. El operativo en la casa de Mendoza fue comandado por el excomisario general, Cristian Sola, que por entonces era el subjefe de la Policía provincial, y que cuando Tognoli fue detenido quedó a cargo de la fuerza provincial. Duró en ese puesto cuatro meses, hasta que el ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, le pidió la renuncia, por sospechas de enriquecimiento ilícito.

Gabriela Albanesi/ UNO Santa Fe/ galbanesi@uno.com.ar

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